Lauren ha estado embarazada desde 2012… Sí, del mismo bebé. Un embarazo de cinco años. ¿Por qué? Porque no puede permitirse el lujo de dejar su trabajo en el que la baja por maternidad es inexistente. Es por ello que al saber que iba a ser madre «decidió» permanecer embarazada durante 260 semanas. Porque no puede permitírselo.
Evidentemente, es imposible que esto suceda. La mujer no está embarazada. Es un genial anuncio creado para concienciar sobre la penosa política social de Estados Unidos, uno de los pocos países del mundo que no tiene baja remunerada por maternidad.
El anuncio fue creado por la Asociación Nacional de la Mujer y la Familia (National Partnership for Women & Families con un mensaje en tono de humor de una situación que en realidad es lamentable.
Lauren está esperando a que su bebé cumpla 6 años para que pueda nacer, puesto que antes es imposible ausentarse del trabajo para atender a un bebé tan pequeño. Un mensaje muy gráfico de que en la actualidad, las madres deben aguantarse embarazos de 5 años, que es absolutamente imposible, o elegir entre su trabajo y ser madres.
Con este anuncio, se pretende causar impacto en los gobernantes para que tomen medidas en el Congreso. Reclaman la creación de un sistema sólido de ayudas a los trabajadores que deseen ser padres, así como un programa médico durante la baja.
Un país sin baja maternal
El 86 por ciento de los trabajadores en Estados Unidos no tiene una baja por maternidad o paternidad remunerada. Sólo cuatro estados tienen esta política y el resto depende de las empresas donde trabajen.
Empresas como Netflix, Spotify, Google, Virgin y Microsoft aplicaron sus propia política con respecto a las bajas remuneradas otorgando a sus empleados diferentes períodos que van desde las 20 semanas al año.
Pero para la mayoría de los estadounidenses la legislación vigente sólo protege el puesto de trabajo a los trabajadores durante 12 semanas tras tener un hijo, y esto sólo sucede en las empresas de más de 50 trabajadores y sin que se perciba salario alguno.
Parece irónico que siendo uno de los países del mundo más avanzado esté todavía tan atrasado en los permisos de maternidad y paternidad. Si lo comparamos con políticas del norte de Europa (Noruega otorga 112 días, Islandia 90, Suecia 70), las diferencias son abismales.
