Ataque cardíaco: emergencia que hay que atender a tiempo

Ataque cardíaco: emergencia que hay que atender a tiempo

Un ataque cardíaco es un daño al musculo cardíaco por pérdida del aporte de sangre. Ocurre cuando las arterias que suministran sangre y oxígeno al corazón se bloquean.

La causa del bloqueo, generalmente, es un coágulo de sangre que se forma en una arteria estrechada por la acumulación del colesterol y otros depósitos de grasa. Sin oxígeno las células se destruyen, produciendo dolor o presión, dando que el corazón no pueda funcionar bien.

Un ataque cardíaco no es un evento estático. Es un proceso dinámico que evoluciona típicamente de 4 a 6 horas.

Los minutos importan

Es fundamental prevenir el daño progresivo tratando el trastorno con medicamentos que disuelvan el coágulo lo antes posible, como trombolíticos o con angioplastia, que deshacen coágulos al igual que el activador tisular del plasminógeno, que además restablecen el flujo de sangre, previniendo o limitando el daño al músculo cardíaco.

Para que sean más eficaces necesitan administrarse en la primera hora u hora y media del inicio de los síntomas del ataque cardíaco.

Un ataque cardíaco puede precipitar también fibrilación ventricular. Este ritmo inestable del corazón produce latidos cardíacos ineficaces, por lo que una cantidad insuficiente de sangre llega a los órganos vitales. Si no se trata inmediatamente, la fibrilación ventricular puede causar la muerte súbita.

Mantente alerta a los síntomas

Durante este tipo de episodios muchas personas pierden tiempo importante, porque no reconocen los síntomas o porque no quieren aceptarlos; la mayoría de las personas evita pedir ayuda por el temor de la vergüenza de una falsa alarma, o porque no entienden el valor de ir a un hospital en seguida.

Un ataque cardíaco produce generalmente dolor en el pecho por más de quince minutos. Sin embargo, puede ser también “silencioso” y no presentar síntomas.

Aproximadamente, la  mitad de las víctimas de ataques cardíacos tiene síntomas de advertencia con algunas horas, días o hasta semanas de anticipación.

La Asociación Estadounidense del Corazón (American Heart Association) presenta los siguientes síntomas de un ataque cardíaco:

  • Pueden presentarse aisladamente y aparecer y desaparecer.
  • Si tienes diabetes, puedes tener menos síntomas o pueden ser más atípicos.
  • Presión molesta, plenitud o dolor opresivo en el centro del pecho o en la parte inferior del abdomen. El dolor puede durar varios minutos o puede ir y venir.
  • Molestia o dolor que se extiende más allá del pecho hacia los hombros, cuello, quijada, dientes, y a uno o ambos brazos.
  • Acortamiento de la respiración.
  • Obnubilación, mareo, desmayo, sudoración o nauseas.

¿Cuál puede ser su tratamiento?

Revisa los pasos que se mencionan a continuación para que puedas actuar a la brevedad, si le da un ataque cardíaco a alguien cercano o a ti:

  1. Llama a los números de urgencia antes que a un médico, ya que podrías gastar tiempo innecesario.
  2. Cuando llames, describe los síntomas, como falta de aire o dolor en el pecho. De esta manera, asegurarás un envío prioritario de los médicos de urgencia. Muchas unidades de policía y bomberos tienen también dispositivos de urgencia para restablecer el ritmo cardíaco; estas unidades pueden responder más rápido que la ambulancia.
  3. Si no tienes contraindicaciones para el uso de la aspirina, mastica una, pues la aspirina inhibe la coagulación de la sangre y ayuda a mantener el flujo de sangre a través de una arteria estrecha. Cuando se toma durante un ataque cardiaco, la aspirina puede disminuir la tasa de muerte en aproximadamente un 25%. Toma una aspirina de dosis regular y mastícala para acelerar su absorción.
  4. Si la persona junto a ti está inconsciente, un operador puede aconsejarle empezar RCP (respiración boca a boca y compresión del pecho). Incluso si no estás entrenado, la mayoría de operadores puede instruirte en la RCP hasta que llegue la ayuda.
  5. Ve al servicio de urgencia más cercano. Identifica con anticipación el sitio que cuente con personal médico todo el día y doctores entrenados para proporcionar cuidados de urgencia.

Un tratamiento exitoso empieza con anterioridad. Reconoce los síntomas y actúa rápidamente.

Temas: ,

virus hanta
Te puede interesar:

Cómo prevenir el virus hanta