El primer baño del bebé debe transformarse en una experiencia única en la que disfrute, se sienta cómodo y relajado, el baño líquido debe hacerse tras la caída del cordón umbilical una vez que se encuentre completamente curado (entre 7 y 14 días después del nacimiento).
Hora de tomar el baño
La hora en que se debe aplicar el baño va a depender de la temperatura ambiental, aunque lo fundamental es evitar variaciones en la temperatura o corriente de aire porque puede provocar que el pequeño se enferme.
¿Dónde puedo bañarlo?
El baño de tina puede realizarse durante los primeros días de vida en el cuarto del bebé o la madre, lo importante es tomar en cuenta que el lugar donde se realice tenga una temperatura aproximada a los 25. 3 °C y si es invierno la madre puede optar por bajar la temperatura con una estufa especial para la habitación.
Algunos especialistas aseguran que las madres ven el primer baño como una de las cosas más importantes y en realidad al principio todo lo que necesita tu recién nacido es que lo limpies con un pañito suave previamente humedecido en agua tibia.
Antes de darle su primera ducha lo más apropiado es que esperes hasta que se le caiga el cordón umbilical, lo que por lo general ocurre entre 10 y 14 días después del nacimiento.
¿Cuántas veces debo bañarlo?
Algunos especialistas recomiendan bañar a un bebé de pocos meses solo dos o tres veces a la semana, por lo general los bebés no sudan como los adultos, lo que quiere decir que los baños regulares no son realmente necesarios.
Las madres sobre todo las primerizas deben entender que un bebé ni se ensucia ni suda como un niño promedio, es por eso que su piel siempre se encuentra fresca y con buen olor, además la piel tiene sus propios mecanismos de limpieza y la excesiva frecuencia o duración de los baños pueden irritarla, sobre todo si el bebé tiene la dermis muy sensible. Cuando el bebé llega al año de edad y comienza a gatear y caminar entonces requieren bañarse con frecuencia, de lo contrario no es lo más recomendable.