Lo habitual es que cuando estés en el segundo trimestre de embarazo vayas al médico cada cuatro semanas. Sólo en caso de presentar alguna complicación deberás asistir con mayor frecuencia.
En este punto de la gestación, es necesario saber qué hará el médico en la visita de atención prenatal del segundo trimestre para que estés al día con el control.
Acumular información
- Iniciará la consulta prenatal revisando tus antecedentes médicos y haciendo un repaso de los temas surgidos en la última visita prenatal.
- Te mostrará los resultados de algún examen que te hayas hecho y será bastante preciso en sus preguntas: ¿ya sientes cómo se mueve el bebé?, ¿aún tienes náuseas?.
- También evidenciará su interés por conocer tu estado de ánimo y cómo te has sentido en general con tu cuerpo.
Control del peso de la madre
- El rango de aumento de peso considerado “normal” es muy amplio, a algunas mujeres embarazadas las pone muy ansiosas ver que van aumentando de peso constantemente por lo que para ellas puede llegar a ser muy desagradable pesarse.
- En estos casos es mejor no mirar lo que marca la báscula o incluso pedirle a tu médico que no te diga el peso a menos que represente un problema.
Control de la presión arterial y la orina
- La presión arterial alta sumada a la presencia de proteínas en la orina puede ser una señal de preeclampsia.
- Si hay proteínas en la orina y no hay presión arterial elevada, podría ser una infección en la vías urinarias.
- Si no hay proteínas en la orina y sí hay una presión arterial alta, podrías tener hipertensión gestacional.
El ritmo cardíaco del bebé
- Si bien es posible oír los latidos del bebé desde las 10 semanas utilizando un ultrasonido Doppler, lo común es que escuches el ritmo cardíaco de tu bebé por primera vez a las 12 semanas aproximadamente.
- De aquí en adelante, la revisión del ritmo cardíaco será una parte rutinaria, importante y hermosa en los controles prenatales.
Lo que debe considerar el médico
- La revisión de tu abdomen le da al médico una idea del crecimiento del bebé y del útero. Cuando estés aproximadamente en la mitad de tu embarazo utilizará una cinta métrica para medir la altura uterina y en base a ese dato hacer la estimación del tamaño de tu bebé y de su tasa de crecimiento.
- Es posible que te ofrezca el análisis de múltiple marcador, que entrega información de las probabilidades de que el bebé tenga algún problema cromosómico u otra anomalía congénita.
- En caso de que tengas un cierto riesgo de tener un bebé con defectos genéticos, el médico de va a ofrecer una amniocentesis, que es el examen que puede diagnosticar anomalías genéticas como el síndrome de Down o los defectos en el tubo neural.
