El peso del recién nacido disminuye por la producción de la leche materna, que no es tan abundante durante los primeros días. A los 5 días después del parto la leche aumenta y lo hace de manera paulatina.
Los bebés alimentados con leche materna, pierden un 10% del peso que se considera normal, en cambio los bebés alimentados con fórmula, pierden solo el 5% los primeros días. Los niños recuperan su peso entre los 10 y 14 días de vida. El peso de tu bebé se relaciona con sus patrones de alimentación, aquí te dejamos algunos consejos para ver si tu pequeño come bien.
- A la semana de vida, un recién nacido debe mojar entre 5 a 7 pañales, 3 o 4 veces al día. Los bebés que se alimentan con leche de fórmula defecan menos que los bebés que amamantan.
- Luego que le das de comer a tu hijo, parece estar satisfecho. No obstante, la impresión que dan es que parecen que quieren comer todo el tiempo.
- La leche materna es ideal para tu bebé, así que ofrécele con frecuencia el pecho, los tres primeros meses es libre demanda, con el tiempo irás viendo cuales son las necesidades que tu bebé requiere. Trata de entender las señales, como cuando mueve la cabeza de un lado para otro, abre y cierra la boca, muerde su mano o llora.
Si aún tienes dudas de cómo y cuándo amamantar y sobre el peso de tu hijo, lo mejor que puedes hacer es consultarle a tu médico. También hay asesores de lactancia, quienes pueden guiarte en la etapa dónde estás conociendo a tu bebé y aprendiendo de las necesidades alimenticias para que crezca sano y fuerte.