Al nacer nuestro bebé, la madre suele prestar total atención a su pequeño, dándole todas las atenciones posibles las 24 horas sin pensar que el postparto es una etapa clave también para la madre.
Durante esta etapa después del parto la madre debe de cuidarse, tener especial atención a sus emociones y, en especial, a su cuerpo que se encuentra en un momento muy difícil en el que debe recomponerse de los nueve meses de gestación de nuestro bebé.
Por eso, aquí les dejamos una serie de consejos para que las madres cuiden su cuerpo tanto por dentro como por fuera para hacer que el postparto pase de la manera más amena posible.
LA MADRE DEBE DORMIR TODO LO POSIBLE
Lo más importante para una madre en esta etapa es descansar, algo que se hace más complicado con el bebé. Y es que durante las primeras semanas los bebés no tienen un ciclo de sueño fijo. Esto dificulta que los padres puedan dormir ocho horas seguidas.
Ante esto, es ideal que la madre, que también suele sentir cansancio durante esta época, sea relevada de toda tarea que pueda ser realizada por otra persona, excepto amamantar al bebé. No sienta vergüenza por pedir ayuda a familiares y amigos con el cuidado del bebé o con otras cuestiones, en esta etapa lo importante es recuperar el estado en el que se encontraba la madre antes del parto.
Otra de los consejos para poder recuperar las horas de sueño es intentar dormir cuando el bebé duerma, para así recuperar un poco de fuerzas para cuando el bebé despierte.
La llegada de un bebé a la familia siempre es una alegría, sobre todo cuando hablamos de una pareja primeriza. Aunque muchos familiares y amigos querrán visitarla no se corte en limitar el número de visitas. El descanso es lo más importante para la madre durante esta etapa de postparto ya habrá tiempo para disfrutar del pequeño en familia.
UNA COMIDA Y ALIMENTACIÓN SALUDABLE SON LAS BASES DE LA RECUPERACIÓN
Durante las primeras semanas de postparto, es posible que la madre sufra de anemia, debido a la pérdida de sangre sufrida en el parto. Para arreglar este problema lo mejor es tener una dieta sana y equilibrada, añadiendo mucho hierro a nuestra dieta. Si la anemia se acentúa el medico nos podrá recomendar reposiciones de hierro a través de pastillas que nos podrán ayudar a resolver el problema más rápidamente.
Otra de las posibles causas del postparto es el estreñimiento. Ante esto, lo mejor es beber mucha agua y comer fruta y verdura fresca sin cocinar. Hay que tener mucho cuidado con el estreñimiento ya que el parto deja heridas en la vagina tras la expulsión de la placenta, por lo que la madre no debe realizar ningún esfuerzo innecesario que pueda dañar más nuestro cuerpo.
UN POCO DE EJERCICIO NOS AYUDARÁ A RECUPERARNOS
Si hemos aumentado peso durante el embarazo, esto nos ayudará en la recuperación y en la lactancia, sintiéndonos menos cansadas cuando damos de amamantar a nuestro pequeño, sobre todo los primeros días. Una alimentación continua y equilibrada resulta muy importante para la recuperación y la activación de la madre durante el postparto y para cuidarse. Los nutricionistas recomiendan que las madres coman cada vez que sientan hambre y, para no aumentar el peso, hagan varias comidas ligeras en las que se encuentren como alimento principal las verduras o las frutas.
La buena alimentación nos ayudará a recuperar el brillo del pelo y de la piel que puede que hayan perdido debido a la gran disminución de hormonas que sufre la madre en el postparto.
REALIZAR EJERCICIO FÍSICO TRAS EL PARTO
Esta es una de las cosas más importantes para cuidarse durante el postparto. Y es que durante el parto, el perineo sufre agresiones debido a la salida del niño provocando que los músculos queden flojos haciendo que, en algunas ocasiones, cuando no están bien fortalecidos, se puedan sufrir perdidas de orina al realizar un esfuerzo o estornudar. Esto hace que después del parto la zona de la pelvis deba reeducarse para no sufrir alteraciones en la zona de sujeción de los órganos y para volver a gozar de una vida sexual satisfactoria.
Lo mejor para recuperar la tonificación de la zona perineal es realizar los ejercicios de Kegel a partir de la sexta u octava semana de haber dado a luz, cuando los tejidos ya se han regenerado lo suficiente. Los ejercicios de Kegel sirven para tonificar los músculos de la pelvis y evitar posibles problemas de incontinencia urinaria. Una vez que hayamos recuperado la tonicidad de los músculos de la pelvis podremos comenzar con otros ejercicios físicos.
Una vez haya finalizado la reeducación perineal, la madre puede pasar a retomar su actividad física poco a poco. Lo mejor es comenzar con una actividad sencilla y relajada como la natación o el pilates. También podemos aprovechar para salir a andar con el bebé mientras a este le da el aire.
La actividad física no solo nos ayudará a perder peso y fortalecer nuestros músculos después del parto, además nos proporcionarán un momento para las madres y para su propio bienestar, aunque lo practiquemos con nuestros pequeños. El ejercicio físico también es un buen momento para salir de casa y tomar el aire y cuidarse.
PACIENCIA ANTE LOS CAMBIOS HORMONALES
Los fuertes cambios hormonales y la falta de sueño que provoca el parto puede hacer que en los días posteriores de dar a luz la madre pueda sentir tristeza y agobio.
Lo mejor ante esto es ser paciente, sentarse tranquilamente y no sentirse abrumada. Seguramente estas sensaciones desaparezcan al poco tiempo, pero si por algún casual persisten durante más de dos semanas, lo mejor es consultar a nuestro médico ya que la madre podría padecer depresión posparto.
Lo mejor para que no suframos estas sensaciones emocionales es descansar lo máximo posible e intentar de conseguir un tiempo para nosotras, que nos permita superar el estrés por los cambios y la vulnerabilidad que podemos sentir en esta etapa tan crucial de nuestra vida en la que todo cambia de repente.