Existen varias maneras de inducir el parto de forma natural. Siempre que no esté desaconsejado por el especialista, puedes intentar con alguna de estas alternativas:
- Mantente activa, ya que el balanceo pélvico favorece el ablandamiento del cuello uterino.
- Estimula con cuidado tus pezones y practica relaciones sexuales, ya que esto produce oxitocina, hormona que estimula las contracciones uterinas.
Por mientras que el bebé no nace, puedes controlar sus movimientos cada hora al interior del vientre para vigilar su estado de salud. Si notaras que no se ha movido en algunas horas, es mejor notificar al doctor.
Un bebé que nace después de la semana 42 es denominado un bebé posmaduro. Por lo general, son bebés más grandes, no tienen tanta capa de vérnix caseosa y pueden presentar una piel seca, agrietada o arrugadita. Esto sucede porque al nacer tardíamente el bebé usa sus reservas de grasa como alimento, por lo que la piel se apergamina. También puedes notar más pelo en su cabeza y las uñas más largas.
Otro signo de un bebé retrasado es el color de su piel y del cordón, los que toman un tono amarillo.
Los retrasos se clasifican en grados, siendo el grado 3 el máximo. En estos casos, se pueden generar algunos peligros, si bien a largo plazo no se observan complicaciones. Una vez que el bebé es tratado por el médico, el desarrollo es normal.
En el caso de la mamá, un parto inducido puede ser muy cansador, ya que el embarazo ha durado tanto. Es normal sentir frustración y ansias por ver al bebé, pero es fundamental que logres la calma y tengas el apoyo de tu familia mientras esperas.
Puede que tu bebé requiera una ayudita para nacer. No te alarmes si tu embarazo tarda, mientras esté controlado. Si se presentaran problemas de salud para ti o para tu bebé y no sirven los métodos naturales para inducir el parto, se llevará a cabo una inducción artificial.