Hoy en día se viven tiempos de pandemia, y las mujeres embarazadas sienten miedo por su salud y la de sus hijos. A pesar de que no hay evidencias de infecciones presentes en los fetos, es importante tomar en cuenta que un parto natural puede extenderse por más de ocho horas, lo que lleva a mantenerse en constante acercamiento con un significativo número de doctores y enfermeros a medida que cambian de turno.
Risgos y miedos de la madre
Aún hay mucho que descubrir sobre esta enfermedad que ataca las vías respiratorias y la forma en que perturba la salud de las embarazadas y sus bebés, lo que consigue generar incertidumbre y preocupación en las futuras madres.
Con seguridad los planes que se tenían para el parto cambiarán radicalmente debido a este virus desconocido, y este dilema aunado a la falta de consejos de los médicos sobre la situación, pues es la primera vez que esto sucede también para ellos, hace que las futuras madres se sientan más vulnerables y no sepan afrontar el escenario. Pero tranquila, Facemama te presenta las siguientes recomendaciones para que sepas qué cuidados debes tener cuando llegue el momento del parto.
Recomendaciones para cuidarte al momento del parto en pandemia
Prepárate para ser flexible en cuanto a lo que pensaste que podría ser tu parto, pues en la actualidad vivimos una situación muy anormal con la pandemia y todo puede cambiar de un momento a otro.
- Existen las opciones de programación de una inducción al parto o una cesárea, si alguno de ellos es el caso, tú y la persona que te apoya (esposo, madre, padre, entre otras) deberían hacerse una prueba de detección para COVID-19 de 24 a 48 horas antes del ingreso al hospital. Es posible que reprogramen la inducción o cesárea si tienes síntomas o el examen da positivo para coronavirus.
- Limitar el número de personas en el cuarto durante el trabajo de parto para proteger tu salud y la de tu bebé es otra de las medidas que debes tomar. También las visitas después del parto pueden verse afectadas, pues deben reducirse al mínimo por tu bien y el del bebé, y la estadía en el hospital será más corta de lo tradicional para evitar contacto con otras personas que puedan padecer esta afección. Lo más probable es que estas medidas ya te las impongan en la clínica u hospital y que como máximo permitan la visita del padre.
- Se recomienda que durante la hospitalización y después del parto utilices mascarilla y tengas las manos muy limpias cuando cuides de tu bebé recién nacido.
- Puedes mantener la cuna de tu bebé junto a tu cama mientras te encuentres en el hospital, pero se recomienda que mantengas a una distancia razonable del bebé.
- Extrae leche materna para el bebé o amamanta solo después de lavarte el torso y las manos y usa una máscara quirúrgica mientras se alimenta.
- Toma en cuenta que si estás enferma con COVID-19, debes estar separada temporalmente de tu bebé recién nacido, además de, renunciar al contacto piel con piel y a la lactancia para prevenir que el bebé contraiga el virus.
En cuanto a lo anteriormente mencionado, algunos expertos se preguntan si separar a madres y recién nacidos es prudente o justificado debido a la escasez de datos sobre los efectos de COVID-19, ya que, interrumpir este vínculo que se produce en los primeros días de vida podría tener consecuencias, pero por ahora es la mejor forma de protegerlos mientras no haya mas evidencia. Finalmente, mantener a los bebés seguros después que son dados de alta del hospital es un gran desafío, pero para conseguirlo sigue las medidas que ya conoces sobre el uso de mascarilla, el distanciamiento y lavado de manos con agua y jabón en todo momento. También considera hablar con tu familia y postergar lo más posible las visitas para poder minimizar el contacto.