Jacqueline Monrroy, nutricionista da algunas recomendaciones para conmemorar la llegada de un nuevo año comiendo de forma sana y nutritiva.
Luego de la visita del Viejito Pascuero, ahora una de las principales preocupaciones de los días que vienen será cómo celebrar el año nuevo. Esto implica que en algunas ocasiones se caiga en algunos excesos con la comida que hay que evitar para prevenir enfermedades o posibles intoxicaciones.
La nutricionista Jacqueline Monrroy, asegura que: «Si no se está acostumbrado a cenar, la noche del 31 de diciembre se debe preferir hacer una comida liviana, que incluya carnes blancas y verduras. Lo ideal es evitar preparaciones como frituras, grandes volúmenes o muchos platos (entrada, fondo, postre)».
“Se puede hacer una cena tipo buffet para que la persona prepare su plato a su gusto y en las porciones que pueda tolerar. También es importante el horario de cena, la idea es que no sea muy avanzada la noche”, añade.
Un buen menú para la cena navideña
Un buen menú incluye carnes blancas como pescados al vapor o al horno sin salsas, pollo o pavo sin cuero, también al vapor o al horno, la carne de vacuno que tenga poca grasa (filete, lomo liso) sin salsas picantes o con muchos aliños. Todo esto puede acompañarse con 1 porción pequeña (½ o ¾ taza) de arroz, cuscús, quínoa o papas cocidas, duquesas al horno, entre otros.
No pueden faltar las ensaladas de hojas verdes, tomates cherries, apio, palta, etc. Lo recomendable es comerlas sin agregados de mayonesa, la puede aderezar con salsa de yogurt con ciboulette, por ejemplo. De postre unas brochetas de frutas de la estación dándole énfasis a los berries, como frutillas, arándanos, guindas, murtas, etc.
Lo más importante es festejar en familia, compartir una cena liviana, saludable, que no complique a la dueña del hogar, utilizando ingredientes conocidos, fácil de comprar y económicos. “El ingrediente principal es el cariño”, finalizó Jacqueline Monrroy.