Las naranjas, frutas cítricas, son una aliadas para la salud de los niños pues son fuentes de vitamina C, que ayuda mantener sus defensas elevadas.
Pueden ser consumidas en trozos, jugos o postres y cada una de esas presentaciones se caracterizarán por su agradable sabor.
Científicos de distintas universidades, asentadas en Europa, América y Asia, consideran que este alimento es una fuente incalculable de nutrientes que ayudan a que el cuerpo humano se desarrolle con normalidad. Hoy se darán a conocer las razones por las que el producto debe ser incluido en la dieta de los menores de edad.
Beneficios que produce las naranjas en los humanos
Revista Mi Pediatra indicó algunas cosas positivas que producen las naranjas en los adultos y jóvenes. Entre ellos se pueden destacar los siguientes:
- Combate enfermedades. Son buenas para prevenir males como la gripe y el estreñimiento. También ayuda a reducir la fiebre en momentos en los que se presente.
- Producto anticancerígeno. Estos frutos tienen capacidadades para reducir la aparición de tumores. Esto se debe a que retrasan los procesos de oxidación de las células.
- Mejora la digestión. Facilita el tránsito intestinal y la absorción de nutrientes en el cuerpo, para facilitar que se desechen sustancias que no contribuyen con el óptimo funcionamiento del organismo.
Más bondades de este alimento
Mapfre dio a conocer otros beneficios que tiene el consumo de naranjas en los pequeños. Permiten la obtención de elementos importantes que colaboran con el funcionamiento de cada uno de los órganos.
- Aporta potasio. Este mineral facilita la transmisión de impulsos nerviosos, así como el movimiento. Esta sustancia evita los calambres, porque previene la deshidratación.
- Posee hierro. Esta sustancia impide la aparición de cuadros de anemia, que es consecuencia de la falta de nutrientes.
- Regenaración de tejidos. Su consumo diario, en cualquiera de sus versiones, ayuda a que se reconstruyan los ligamentos y articulaciones. Eso previene lesiones.
Por todo lo anteriormente expuesto, comer naranjas, o tomar su zumo, es el aliado ideal para que los infantes, al igual que sus papás, puedan mantenerse sanos por largos períodos.