Es normal que las mamitas se planteen la interrogante si se debe o no comer pescado durante el embarazo, sabemos que algunos contienen mercurio y surge la duda de qué podría pasar si se come pescado con altas dosis de este elemento.
Para saber si es conveniente eliminar el pescado de la alimentación, qué pescado contiene más mercurio o cuál podemos consumir, te damos algunas recomendaciones.
¿Se puede comer pescado durante el embarazo?
Esta interrogante es muy común entre las embarazadas, incluso en aquellas en que el consumo de pescado y mariscos no es muy recurrente.
- El pescado es una fuente importante de ácidos grasos omega-3: DHA (ácido docosahexaenoico) y EPA (ácido eicosapentaenoico), que ayudan a desarrollar el cerebro y los ojos del bebé.
- Otro factor que debemos considerar es que el pescado es bajo en grasas saturadas y alto en proteínas, vitamina D, y otros nutrientes que son esenciales para el desarrollo del bebé, así como para un embarazo saludable.
- Sin embargo, algunos tipos de pescado contienen contaminantes como el mercurio. En dosis elevadas, este metal perjudica el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso de un bebé.
- El mercurio se acumula en el cuerpo y éste tarda en eliminarlo, aunque hayas dejado de ingerirlo.
- Si bien es muy importante que las embarazadas coman algo de pescado, debemos considerar cuáles son seguros y en qué cantidades.
El mercurio en el pescado
- Cuando llega al agua, la bacteria lo convierte en metilmercurio, los peces lo absorben donde nadan y de los alimentos que consumen.
- El metilmercurio se aferra fuertemente a las proteínas del músculo del pez y permanece allí incluso después de haber cocinado el pescado.
- La mayoría del pescado y mariscos está contaminado con aunque sea un poco de mercurio, pero son los peces grandes los que se ven más afectados, ya que acumulan más por comerse otros peces pequeños que también han absorbido mercurio.
- La mujer embarazada debe evitar ingerir: tiburón, pez espada, sierra y blanquillo, atún fresco o congelado, róbalo rayado, la corvina.
Consecuencia de la ingesta de altas dosis de mercurio
- El cuerpo absorbe fácilmente el metilmercurio del pescado y lo almacena durante meses. Sucede lo mismo con el embarazo, ya que el mercurio atraviesa la placenta y puede quedarse largo tiempo allí.
- La exposición a altas concentraciones de metilmercurio durante el embarazo puede afectar al desarrollo del cerebro y del sistema nervioso de un bebé.
- Las consecuencias pueden ser leves o incluso graves. Por ejemplo, sus habilidades cognitivas (como la memoria y la atención), el idioma, las habilidades motoras y la visión pueden verse afectados.
Pescados recomendados para comer
Los pescados que se pueden recomendar son aquellos bajos en mercurio y altos en grasas saludables como: la anchoa, la trucha arco iris (de criadero), el salmón, las sardinas y el pescado blanco.