En realidad la mayoría de los alimentos son muy seguros porque cada uno aporta lo necesario, sin embargo, hay algunos productos que debes evitar, así lo explica el médico ginecólogo-obstetra, Jorge Sandoval que añade además “los alimentos ahumados durante el embarazo no deberían causar problema, a menos que se trate de mariscos por las alergias que están asociadas con este tipo de comida”.
¿Por qué evitar los mariscos?
Este tipo de alimento puede contener una bacteria que se llama listeria, por ende la única manera en que puede ser digerido es si ha sido previamente bien cocido. No se recomienda la ingesta de este alimento en la gestación, incluso debería ser evitado en estado normal o por lo menos consumirse muy poco.
Listeria en el embarazo
La listeria puede aparecer después de ingerir platos con esta bacteria, los síntomas son percibidos días posteriores a su consumo, produciendo malestares como fiebre, diarrea, dolor muscular y de cabeza que repercuten tanto en la madre como en el bebé.
Sin embargo, las madres sí podrían consumir comidas ahumadas, siempre y cuando contengan una buena preparación, es decir que no sean alimentos precocidos y reciban una buena cocción. Hay sustentos esenciales que contienen vitaminas y minerales necesarios para el desarrollo del feto en el útero, pero esto no quiere decir que se debe consumir cualquier nutriente.
Los alimentos pueden ser muy necesarios, pero si no aplicamos una higiene y mantenimiento en cada uno de los provisiones a consumir, entonces todo lo positivo que nos proporciona podría convertirse en un arma de doble filo, dice el especialista.
Riesgos
Los alimentos ahumados contienen ciertos riesgos que pueden afectar a la salud en general, por el alto contenido de productos químicos utilizados para ayudar a ahumarlos, por lo que es obligatorio limitarlos dentro del proceso de gestación. Lo recomendable es comer solo alimentos bien cocidos y consumirlos en estado fresco, es decir lo antes posible para prever la contaminación bacteriana.