Embarazadas golosas en la mira: ¿Sabía que padecer obesidad durante el embarazo puede poner en riesgo la vida de la madre y hasta la vida del hijo que está por nacer? Aquí damos cuenta de los riesgos y los pasos que toda embarazada debería tomar para resguardar su salud y la de su hijo.
Experto: Marcelo Rodríguez, ginecólogo.
En promedio las mujeres en Chile suben entre 11 a 13 kilos durante el embarazo, pero en rigor no debieran superar los 7 a 10 kilos extra. Y es que definitivamente, aunque es sabido que no es conveniente “alimentarse por dos”, la mayoría de ellas se da ciertas licencias durante la gestación.
¿Cuáles son los riesgos asociados?
Mayor riesgo de enfermedades maternas, como síndrome hipertensivo del embarazo y pre-eclampsia y una mayor probabilidad de muerte fetal, son algunos de los peligros que implica una alimentación inadecuada durante el embarazo. Así lo explica el Doctor Marcelo Rodríguez, ginecólogo, quien sostiene que el aumento de la tasa de cesáreas se debe a una mala progresión del trabajo de parto y favorece la utilización de fórceps.
También existen una serie de riesgos para el hijo en gestación, pudiendo ocurrir prematuridad secundaria a la interrupción prematura del embarazo e incluso muerte fetal.
El especialista explica que además de cuidar la cantidad, las embarazadas deben evitar infecciones que podrían provocar carnes rojas mal cocidas o verduras que crecen a ras de suelo y que al consumirlas, mal lavadas, podrían provocar toxoplasmosis congénita en el bebé. Asimismo, pescados crudos y quesos no pasteurizados son inconvenientes, pues la listeriosis podría causar parto prematuro y muerte fetal, entre otras consecuencias.
Para mantener una alimentación sana durante este período se deben preferir frutas y verduras, legumbres, carnes rojas y pescados bien cocidos, además de evitar el consumo de azúcares. Hay que recordar constantemente que si la madre se encuentra en buen estado de salud, el bebé también lo estará.