Un niño prodigio es una persona menor de 18 años que posee una o más habilidades o talentos que superan con facilidad las habilidades normales de los niños de la misma edad.
A menudo puede haber un patrón llamativo en la forma en que los niños de este tipo adquieren talentos particulares. Otro enfoque de este tema es la crianza positiva y negativa de los niños prodigio y el grado en que estos niños están mental y socialmente conectados con sus compañeros.
Habilidades de un niño prodigio
Además, las habilidades especiales de los niños de inteligencia normal se pueden comparar con los eruditos y el fenómeno de las habilidades de astillas autistas.
Es más fácil etiquetar a los niños más pequeños como niño prodigio, ya que muchos de ellos desarrollan talentos o habilidades especiales a medida que crecen. Puede haber miles de adolescentes mayores que pueden practicar matemáticas muy avanzadas o brindar hermosas interpretaciones de violín solo.
Es menos difícil identificar a los niños más pequeños con talentos particulares, ya que pocos de sus compañeros tienen el mismo talento. En general, se pueden señalar algunos rasgos del niño prodigio. Es probable que estos niños aprendan cosas en sus niveles avanzados con muy poca instrucción formal.
También avanzan rápidamente, evolucionando de operaciones simples a más difíciles en un corto período de tiempo. Algunos prodigios tienen múltiples áreas de fuerza.
Por ejemplo, un estudiante puede ser tan fuerte académicamente que a la edad de 10 u 11 años esté apto para las exigencias académicas de la universidad, pero otros niños prodigio pueden tener solo una habilidad o aptitud específica.
Qué NO deben hacer los padres de un niño prodigio
Hay buenas y malas historias sobre lo que los padres exigen del niño prodigio. Lo peor de todo son los padres que utilizan al niño para beneficio personal, como es el caso de Mozart y Beethoven. Obligar a un niño a ser un niño prodigio también se considera imprudente.
Tal vez sea en Hollywood donde los efectos de crianza intrusivos o egoístas han sido tan devastadores para muchos actores prodigio talentosos. Judy Garland, por ejemplo, dejó el plató de El mago de Oz adicta a los estimulantes y tranquilizantes que su madre le dio siguiendo las instrucciones de los ejecutivos del estudio. Nunca pudo liberarse de la adicción a las drogas y, como resultado, su vida se vio truncada.
Los muchos padres que encuentran formas para que los niños exploren sus dones y pasiones sin presionarlos o colocarlos en ambientes hostiles para los niños brindan un contraste necesario con historias de crianza tan difíciles.
Cómo influye la familia
A los niños con familias como esta les puede ir mejor emocionalmente porque sus vidas son más similares a las de otros niños y es más probable que interactúen con sus compañeros de manera regular.
Aun así, también hay un poderoso argumento de que la creatividad está ligada genéticamente a condiciones como el trastorno bipolar. Como tal, un niño prodigio con una crianza conciente aún puede ser vulnerable a los trastornos del estado de ánimo, y los padres deben ser conscientes de este riesgo.
Si los niños autistas tienen talentos especiales, se les puede llamar sabios o se dice que tienen habilidades especiales. Algunas de estas habilidades, como los cálculos avanzados, son sorprendentes, especialmente porque los niños que las poseen pueden verse gravemente afectados de otras maneras.
Al igual que el niño prodigio, el erudito autista no necesariamente tiene que aprender la habilidad, sino que la desarrolla muy rápidamente. Hay pocas explicaciones generalmente aceptadas de cómo o por qué estas habilidades o talentos se desarrollan en un niño.
