La salud bucal es importante en todas las etapas de la vida de una persona, sobre todo desde la niñez, pero la mayoría de los niños le tienen miedo al dentista y los padres no entienden por qué sucede esto.
Lo primero que se debe comprender en este caso es que los niños no nacen con miedo al dentista sino que lo adquieren antes de vivir la experiencia de asistir al dentista y esto en muchos casos se debe a diversas razones.
Miedo al dentista
- Miedo a los desconocido: Cuando los niños sienten miedo al dentista, la mayoría de las veces es porque no conocen a ciencia cierta lo que les sucederá dentro de la consulta o también porque han escuchado de parte de sus padres u otro adulto dentro de su núcleo familiar experiencias vividas que no le parecen muy agradables.
- Preparación previa a la visita: Otra de las razones por las que los niños temen ir al dentista, es porque sus padres intenta prepararlos antes de la consulta utilizando palabras que los llenan de angustia y ansiedad, como por ejemplo “no debes tener miedo porque no te dolerá”.
- Temor al sentir invasión de su espacio: El niño puede sentir miedo al dentista al saber que tendrá al especialista muy cerca de él, pues apreciará que no podrá moverse ni tener su propio espacio, además el simple hecho de saber que poseerá abierta la boca por un largo tiempo lo hará llenarse de ansiedad.
- Miedo al dolor: Por escuchar hablar de las experiencias de otros con el odontólogo o por sus propias vivencias anteriores el niño estará angustiado al no saber con exactitud cuánto dolor podrá sentir en su consulta y esto en muchos de los casos es una razón consistente para que este tema ir al dentista.
- Inseguridad: En muchos casos los niños temen ir al dentista porque no se sienten en confianza al pensar que el odontólogo no cumplirá cuando le dice que no le dolerá o que estará todo bien.
- Entre otras.
