Algunos especialistas indican que es muy importante que los papás hablen con su hijo sobre la hiperactividad. Si lo evaden no ayudarán y contribuirán a aumentar su frustración y desconcierto.
El rol de los papás
Los papás son muy importantes en cuanto al apoyo y comprensión de niños hiperactivos; y esto, debido a que diariamente se enfrentan con dificultades que cuestionan su autoestima.
Tanto el papá como la mamá, son quienes mejor pueden ayudarle a enfrentar las dificultades, y también, son los encargados de motivar a su hijo y, cuando corresponda, alabarle sus logros.
Existen varios consejos y pautas sencillas que los papás pueden llevar a cabo en la casa para explicarle al niño lo que le pasa. Es muy importante para el niño saber de qué se trata y qué es, finalmente, lo que le está ocurriendo y el modo de enfrentarlo:
- Afrontarlo directamente
No es bueno que lo papás le den vueltas al asunto sin llegar a lo fundamental del tema. Para esto, tienen que usar los términos tal y como son. Ser claros y directos, resulta una muy buena estrategia.
- Adaptar el lenguaje a la edad del niño
Los papás deben hacer uso de un vocabulario que el niño pueda comprender.
Por lo mismo, se hace necesario adaptarlo a su nivel de conocimiento. Así, entonces, le pueden explicar que tiene un problema y que este puede manifestarse de las siguientes maneras: es difícil que su cuerpo se esté quieto mucho tiempo, es complicado que preste atención o que puede sentirse irritado en cualquier momento.
- Dosificar la información
No siempre sirve que los papás le den toda la información de golpe al niño. Cuando el pequeño recibe toda la información, sin filtro alguno, es muy probable que no pueda asimilarla bien.
Los papás pueden dosificar los temas para irle explicando poco a poco el trastorno del TDAH. Toda explicación, por supuesto, debe ser de manera pausada.
Los papás no deben asustar al niño con un tono de preocupación, pues esto desencadenará una gran ansiedad en el pequeño.
¿Cómo actúa un niño después de enterarse?
Los expertos indican que para el niño es un alivio conocer que tiene TDAH ya que comprende la razón de su comportamiento. Además, logra entender por qué actúa de un determinado modo y le ayuda a ser consciente de que puede mejorar.
No se trata de que se perciba como un ser distinto a los demás, ni mucho menos, extraño; pero sí, que se vuelva consciente de su particularidad. Podrá, entonces, ser más responsable de lo que le está ocurriendo, pues ya lo entiende.
