Varios son los factores a considerar a la hora de elegir un buen establecimiento: la infraestructura, el personal, el equipamiento, el proyecto educativo, el material didáctico y, en especial la seguridad del lugar, de manera que garantice el bienestar de los niños.
Elegir un jardín infantil es una de las decisiones más importantes para los padres, ya que el jardín o la sala cuna, será el lugar donde pase tu pequeño durante mucho tiempo.
Cómo elegir el jardín infantil ideal
- Evalúa la infraestructura
Debe tener una buena iluminación, servicios de higiene apropiados, calefacción, un buen sistema de ventilación, así como patios y áreas seguras para los niños. Las salas y otros espacios educativos deber ser acogedores y bien decorados.
- Evalúa el equipamiento y el material didáctico
Deben estar a la altura de los párvulos, así como seguro y cumplir su función de potenciar el aprendizaje en todos los ámbitos pedagógicos.
- Evalúa el personal
Debe haber una directora, educadoras, técnicos, una manipuladora de alimentos y algún auxiliar.
- Evalúa el proyecto educativo
Debe contemplar la misión del establecimiento, sus objetivos y metas, sus normas y organización, el sistema de evaluación para los niños y la participación de la familia, ya que de esa manera el niño se desarrollará adecuadamente.
Asegúrate de visitar el establecimiento y verificar por ti misma que se cumplan estas condiciones, incluso puedes pedir los documentos que acrediten los títulos y estudios que el personal tenga.
El jardín: su segundo hogar
Según la edad de los niños (desde los 84 días hasta los 5 años), la educación a nivel parvulario se distribuye en los siguientes grupos:
Sala Cuna:
menor – desde los 84 días hasta 1 año.
mayor – desde 1 año hasta 2 años
Medio:
menor – desde 2 años hasta 3 años.
mayor – desde 3 años hasta 4 años.
Transición:
Primer nivel (prekinder) – desde 4 años hasta 5 años.
Segundo Nivel (Kinder) – desde 5 años hasta 6 años.
Los padres deben saber manejar el sentimiento de desprendimiento
- Naturalmente, al principio te costará mucho dejar a tu bebé en otras manos, pero muchas mamás han comprobado que, aunque se van con un nudo en la garganta, al volver encuentran a sus pequeños felices y entretenidos.
- Después de un tiempo, los niños quieren ir al jardín porque ahí están sus amigos, incluso desarrollan habilidades sociales y un aprendizaje que en casa no sería posible.
- No puedes transmitirle al pequeño inseguridad.
Los padres deben aportar al aprendizaje del niño
Debes contribuir al aprendizaje del niño colaborando con el jardín, de manera que puedas participar con éste y asegurarte de que cumple con todos los requisitos fundamentales. Debes tener presente que el jardín no sustituye tu papel en el desarrollo de tu hijo y que no se trata de suplantar a los padres, sino complementar la labor que tú hagas en casa, estimulando apropiadamente al niño para que se su recepción sea mejor y se desarrolle en los aspectos motrices, cognitivos, emocionales y relacionales.
El ambiente donde se desenvuelva tu hijo es fundamental para que desarrolle su personalidad, autonomía y habilidades sociales.