Enseñar a los niños cómo comportarse

Enseñar a los niños cómo comportarse

Los buenos modales, ya sean verbales o no verbales, son una base importante de nuestra sociedad y también de gran importancia para el futuro de los niños. ¿Cómo enseñar a los niños cómo comportarse?

Tirarse pedos, hacer ping o empujar hacia adelante: a veces a los padres les gustaría hundirse en el suelo avergonzados cuando sus hijos llaman la atención por su mal comportamiento. 

Los niños ya pueden aprender sus primeras bromas y modales en la edad de jardín de infantes, y la función de modelo a seguir de los padres juega un papel importante en esto.

Enseñar a los niños cómo comportarse: El buen comportamiento a través de la imitación

Los niños absorben el conocimiento a través de la imitación como una esponja. También adquieren modales de esta manera. Si los padres, los abuelos o el entorno inmediato en la guardería y la escuela demuestran las reglas básicas más simples de la convivencia, es fácil que el niño las aplique.

«Por favor» y «gracias», un sincero «perdón» o un saludo cortés se convierten fácilmente en una acción completamente natural para los más pequeños. De esta forma, no solo aprende modales verbales, sino también no verbales. Si tiendes a maldecir, tu hijo copiará el comportamiento.

Si eructas en la mesa del comedor de casa, la próxima vez tu hijo no distinguirá entre la mesa del restaurante y la de la cocina de casa…

Más elogios, menos culpas

Los padres tienden a criticar inmediatamente el mal comportamiento de sus hijos sin elogiar sus buenos modales. Sin embargo, si los esfuerzos del niño son apreciados y elogiados en detalle, esto da más frutos que las constantes advertencias.

«¡Fue realmente genial cómo ayudaste a la niña!» o «Hoy te has cepillado los dientes muy bien», refuerza el comportamiento positivo.

Explicar las reglas básicas y las consecuencias

Es difícil para un niño entender cuando las reglas se establecen con la afirmación: «Tú no haces eso» o «Eso no está bien». Cuando entiendan por qué deben taparse la boca al estornudar, aceptarán la regla con más naturalidad.

Las comparaciones también aclaran a los niños de jardín de infantes por qué existen ciertas reglas básicas. «¡Por favor déjame terminar, no te interrumpiré si quieres decirme algo!»

Si los niños saben cómo comportarse con buenos modales, a menudo pueden hacer frente a situaciones desconocidas. Estas simples reglas básicas como «mirar a los ojos al saludar y dar la mano» o «gracias por algo» automatizan muchas situaciones cotidianas y es una forma de enseñar a los niños cómo comportarse.

El papel de modelo a seguir y la asistencia pequeña y discreta vuelven a entrar en juego. En lugar de advertencias constantes, las preguntas simples y los recordatorios son útiles: «¿Ya me agradeciste?» o «¡Por favor, no olvides despedirte!».

¿Con qué frecuencia los padres se disculpan con sus hijos si, por ejemplo, pisaron un juguete, tropezaron accidentalmente con el niño o lo trataron injustamente en una situación estresante? Pero solo cuando los padres muestren a sus hijos la misma consideración se aprenderán las disculpas como una forma de interacción respetuosa y comportamiento interpersonal.

Enseñar a los niños cómo comportarse: ten en cuenta las edades y los límites de los niños

No le pidas demasiado a tu hijo. Un niño de cuatro años no tiene por qué saber todavía que debe defender a un pasajero mayor en el tranvía, mantener la puerta abierta para los demás o decir «de nada». Dando un ejemplo constante e introduciendo gradualmente reglas simples de conducta como «por favor» y «gracias» o un «¿Disculpe?» en lugar de un «¿Eh?», tu hijo aprenderá.

A veces primero tienen que experimentar cómo reaccionan los otros niños o adultos. Si se ríen de él después de un pedo o si los niños ya no quieren jugar con él porque tiene mocos pegados en el dedo, aprenderá de esta reacción y de tu explicación.


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