La depresión en los niños en la actualidad se ha convertido en “algo normal”, algunos especialistas aseguran que cada año se elevan las cifras de casos de niños atendidos por depresión. Pero ¿Influye la depresión de un padre en la vida de un niño?
Un estudio realizado a más de 20.000 familias de Estados Unidos, arrojó que los hijos de padres que han sufrido depresiones en el pasado son más propensos a sufrir problemas emocionales y conductuales que los hijos de papás sin depresión.
¿Cómo reconocer a un padre con depresión?
Los padres con depresión tienden a relacionarse menos con los hijos, a tener conductas menos positivas y más duras, negativas y críticas. Por esa razón es importante dar apoyo y tratar al padre deprimido, pero también intervenir con el resto de la familia, ya que se darán cambios drásticos en la vida diaria y la cotidianeidad se volverá más compleja, además es vital que las personas que se encuentran alrededor eviten que los niños caigan en esta grave enfermedad.
Los niños y un padre depresivo
Los pequeños ven el mundo a través de las “pupilas de sus padres”, por lo que si ellos están deprimidos y ven la vida oscura, los niños podrían aprender a tener la misma percepción de la vida.
Si nuestros hijos viven rodeados de estas situaciones negativas, reaccionarán ante el mundo y el entorno de la misma manera de como lo hace su padre. Es vital que toda la familia se someta a la ayuda de un profesional pues no solo el depresivo se está viendo afectado.
Posibles síntomas de la depresión en padres
- Rabia e irritabilidad.
- Ansiedad o inquietud.
- Pérdida de interés en el trabajo y en hogar.
- El deseo sexual disminuye.
- Sentimientos de tristeza.
- Dificultad para concentrarse o recordar detalles.
- Fatiga, falta de sueño y en ocasiones el exceso de sueño.
- Las personas comen demasiado o no comen nada.
- Dolores o malestares físicos como dolores de cabeza.
