Las reglas son parte integral de la vida y estos valores deben inculcarse en los niños desde una edad temprana. Para que tu hijo pueda cumplir las reglas más adelante en la vida, debes incluirlas directamente en la crianza.
Las reglas dan seguridad
Cada familia es tan individual como la persona misma y, sin embargo, existen ciertas reglas en la vida para que la vida familiar cotidiana se pueda abordar bien juntos. Los niños necesitan aprender qué les hace daño y ser considerados con las necesidades de los demás.
Pero muchos no saben cómo se deben diseñar las reglas para la familia y cuál es la mejor manera de implementarlas. En el primer paso, no debes ver las reglas como una restricción, sino como una especie de ayuda de orientación para tu hijo.
Las reglas transmiten principalmente estructura y seguridad. Los niños pueden así evaluar en cualquier momento a lo que tienen que adaptarse y conocer su lugar dentro de la familia.
Con reglas en su educación, prepara a su hijo en consecuencia para la vida posterior y promueve su desarrollo.
Los padres primero deben pensar en lo que quieren transmitir a sus hijos y qué reglas son importantes para ellos.
Las reglas se aplican a los niños y también a los padres
Es obvio que los niños primero tienen que acostumbrarse a las reglas en el curso de su crianza. Pero es igual de importante para tu hijo que para ti también cumplir las reglas y ser el ejemplo.
Una convivencia armoniosa y ordenada solo puede tener lugar si todos también se apegan a sus reglas.
También trata de transmitirle a tu hijo exactamente por qué tiene o debe apegarse a esta y aquella regla. Al establecer las reglas, ten en cuenta que tu hijo no solo tiene deberes que cumplir, sino también derechos que debes implementar en tu crianza.
Puede ayudar a establecer, discutir y restablecer juntos ciertas reglas familiares. Los niños se sienten tomados en serio cuando las decisiones no se toman en su cabeza y también promueve la independencia de los niños.
Consejo: Presenta un «consejo familiar», por ejemplo, todos los domingos con un delicioso postre. Repasa y discute la semana pasada: ¿Qué salió bien? ¿Qué podríamos mejorar? ¿Qué reglas deberían aplicarse?
Alguien puede anotar las reglas y resoluciones discutidas, y todos firman la hoja. El próximo domingo, la hoja de reglas se volverá a mirar y negociar si es necesario.
Reglas en la vida familiar cotidiana
Asegúrate que las reglas de su familia no sean solo prohibiciones y restricciones. Sobre todo, las reglas deben garantizar una interacción respetuosa con los demás.
Ciertamente, debe haber pautas fijas sobre a qué hora pueden reunirse para almorzar juntos y cuánto tiempo pueden ver la televisión todos los días. Sobre todo, las normas en el ámbito de la competencia social juegan un papel decisivo.
Por ejemplo, todos deberían hablar y tener su propia opinión y poder representarla.
Otra regla importante para ti es la libertad del otro. Ustedes, como padres, no solo necesitan una cierta cantidad de libertad y privacidad, sino que sus hijos también tienen derecho a ello. Las reglas les ayudarán a respetarse unos a otros.
¿Qué hacer si el niño no le gusta cumplir con las reglas?
A menudo tiene que ver con la forma en que se les habla a los niños. Asegúrate de no estar simplemente «quejándote» o culpando al niño por «te dejaste la chaqueta en el suelo otra vez».
Habla a la altura de los ojos y en un tono tranquilo. «Por favor, cuelga tu chaqueta en el gancho». Si repetidamente no sigue una regla, debes seguir una consecuencia lógica.
No hagas amenazas que no puedas (o que en realidad no quieras) cumplir. Anima a tu hijo a comportarse bien y cumplir las reglas.
Reglas fijas y variables
Es útil mantener las reglas básicas como un ritual. De lo contrario, se necesitas mucha fuerza para negociarlos una y otra vez: el error más común de los padres es ceder ante la molestia…
En general, también se deben cumplir las reglas, pero, por supuesto, también hay situaciones que a veces requieren un poco de flexibilidad.
Algunas situaciones solo deben manejarse individualmente, y eso incluye romper una regla o dos.
Por ejemplo, la hora de acostarse se puede retrasar un poco cuando hay visitas. Sin embargo, además de estas variables, existen reglas que requieren un estricto cumplimiento, tales como:
- Tratarse con respeto (escuchar y dejar hablar a la gente, elección de palabras, nadie se ríe de él).
- Sin violencia (sin patadas, golpes, mordidas, etc.).
- En el camino, todos obedecen las reglas).
Cumplir las reglas, no siempre es fácil
Para los niños en particular, cumplir las reglas no siempre es más fácil y primero debe aprenderse a través del proceso de crianza. Por lo tanto, es muy importante que ustedes, como padres, sean un modelo a seguir para sus hijos y den un buen ejemplo.