El hábito de la lectura es fundamental para el desarrollo de los niños, el interés por esta maravillosa práctica puede ser sugerido desde los primeros años de vida. Si tu hijo inicia el contacto con los libros desde muy pequeño probablemente la lectura se convertirá en parte de él, te decimos cómo introducir este hábito en la vida de tu pequeño.
Los niños vienen al mundo y comienzan a descubrirlo, de ahí que tengan una curiosidad innata, así como también una imaginación viva capaz de transformar habitaciones sencillas en historias de piratas y súper héroes, fomentar el interés por la lectura ayudará en los procesos de concentración, cooperación y desarrollo motor del pequeño; contrario a lo que suele pensarse, la actividad lectora no debe iniciar únicamente dentro de una institución o colegio, el hogar es el lugar ideal para invitar poco a poco al menor a adentrarse en mundos paralelos a través de la lectura de cuentos acordes a la edad en cuestión.
Sugerencias
- Lee junto a tu hijo
Los niños sentirán más interés por leer un libro si ven que este hábito está presente en su entorno, si como padres no practican el hábito de la lectura difícilmente tu hijo lo hará.
- Construye un entorno de tranquilidad
Es importante que cuando los niños comiencen a leer lo hagan en un lugar tranquilo, relajado y sin interrupciones, así se relacionará fácilmente con lo que está leyendo u observando en el libro (en el caso de ser muy pequeño).
- Realiza lectura familiar
Los padres pueden leer en voz alta de manera que todos estén integrados en la lectura, cuando esta culmine pregúntale a todos los miembros de la familia en especial al niño: ¿Qué entendió sobre el tema?
- Compra los libros adecuados
Si deseas ir a comprar libros para tu hijo lo más recomendable es que el niño elija el de su preferencia, lo importante es que juntos escojan los más atractivos, para iniciar la aventura.
- Inicia con libros que tengan ilustraciones
Es necesario que inicies con historias simples y si son muy pequeños es aconsejable que tengan ilustraciones, la lectura va por etapas y se acopla al desarrollo, poco a poco vas a poder ir cambiando la profundidad de los libros.
Cuando leemos alimentamos nuestra mente, nuestro espíritu y ocupamos de manera productiva nuestro tiempo, este hábito debe ser parte de una actividad cotidiana, regálale a tus hijos un futuro lleno de saberes.
Como madre o padre tienes las herramientas necesarias para inducir a tu hijo en esta maravillosa práctica. Tomate tu tiempo y siéntate junto a él a leer un hermoso libro lleno de bellos dibujos que les permitan crear un fantástico mundo lleno de aventuras y diversión. Así además de leer pasaran un buen tiempo juntos.