Para que los lazos familiares permanezcan unidos es importante la buena comunicación entre los miembros del hogar, mamá y papá deben crear pilares de confianza para garantizar la armonía y estabilidad de todos, desde el más pequeño hasta el más grande.
Asimismo, es importante fomentar el respeto hacía cada uno de los integrantes de la familia y estos valores deben inculcarse desde pequeños, de esta manera, nuestros chicos verán como hábito primordial mantener una buena relación en casa y apoyarse unos a otros.
¿Cómo mantener a la familia unida?
- Los padres debemos iniciar dando el ejemplo de respeto y armonía familiar, demostrándoles así que viviendo de esta manera traerá beneficios para todos dentro y fuera de casa.
- Establecer la buena comunicación, fluida y sin secretos, aunque en todas las familias existan problemas, lo ideal es comunicarse y llegar a la resolución de los problemas, sin atraer aspectos negativos que no favorezcan la unión.
- Las actividades familiares grupales no sólo son divertidas, además, permiten a los miembros del núcleo familiar, conocerse, desestrezarse y pasar tiempo importante con los seres queridos.
- Permanecer equitativos y justos en el trato que se le da a los niños.
- También es importante fomentar valores como la solidaridad, así, lograremos que niños y adultos se sientan preocupados por el bienestar de toda la familia.
- Las cosas en común, unen, por lo que especialistas en terapia familiar recomiendan que se creen dentro del hogar tradiciones en conjunto, que puedan convertirse en hábitos gozosos de todos en casa.
- Tener un álbum de recuerdos donde se reflejen las actividades y momentos que se han pasado juntos y en familia, puede ser reconfortante en momentos difíciles.
¿Existe un momento específico para pasa en familia?
No necesitas un día especial para compartir y unir a tu familia, cualquier ocasión es idónea y aprovechable para pasar tiempo de provecho con tus seres queridos, en especial con los más chicos de la casa.
Si tienes familiares que viven lejos, puedes organizar una comida o reunirse algún domingo. Para darle valor a nuestros allegados, no es necesario que sea Navidad o Fin de Año.
Las reuniones y el tiempo que le otorguemos a nuestros hijos nos permitirán resolver o evitar algunos problemas, y aunque cada persona es distinta y existan diferencias puntuales, nada debe subestimar el amor y el respeto que une a una familia.