Antes de formar una familia, muchas personas tienen perros en sus casas, y ¿cómo no amarlos? Si el amor que nos otorgan es sublime, espontáneo y fiel. Pero, cuando llega el compromiso y la hora de agrandar el número de integrantes en la familia, las cosas pueden cambiar un poco.
Si tienes un perro en casa y estás embarazada, se pueden tomar ciertas medidas para preparar al perro, tomando en cuenta que, un bebé es un ser vulnerable, delicado e indefenso, por lo que los papás deben ser muy rigurosos en este tema, para que el amigo fiel de la casa para que pueda convivir con este nuevo integrante de la familia.
Lo que debes hacer con el perro antes que nazca el bebé
La llegada de un bebé al hogar es todo un acontecimiento, todos se preparan para recibir a este nuevo integrante, por ello, los papás deben también preparar a su perro. Lo primero que deben saber estos papás es que con la llegada del bebé hay cosas que deben cambiar.
- Por ello, se aconseja que vean objetivamente como es el carácter del perro, si es agresivo y pelea por su territorio y juguetes. En este caso se puede enviar al perro a otro hogar donde pueda estar bien o contratar a un experto que logre corregir el carácter del canino, antes de la llegada del bebé.
- Es necesario adaptar progresivamente al perro sobre el tiempo que ahora pasarán con él, ya que un recién nacido es muy demandante, y los futuros padres ya no tendrán el mismo tiempo.
- Algunos especialistas recomiendan que los futuros padres saquen a pasear a su mascota junto al que será el cochecito del bebé. También se tendrá una idea del comportamiento del perro durante los paseos que realicen juntos y se puede ir corrigiendo si se comporta muy agresivo o con mucha energía.
- También se recomiendan que tengan dentro de la casa un muñeco que se asemeje a un bebé porque ayudará a asociar que hay otro integrante. Cada vez que el perro se muestre calmado junto al muñeco, se le debe recompensar.
- Los paseos del perro deben ser planeados según el nuevo horario que se tendrá disponible, al nacimiento del bebé. Si el perro es muy inquieto se recomienda a los futuros papás que los paseos sean con una correa que controle sus movimientos, hay de varios tipos en el mercado.
- Todos los días se deben dejar como mínimo un cuarto de hora para jugar y consentir al perro, para que el cambio no lo afecte negativamente.
- Acostarse junto al perro para que pueda acariciar la barriga, hablarle al bebé mientras acaricias a tu mascota lo hará familiarizarse con el futuro miembro de la familia.
Cuando el bebé ya esté en casa lo ideal, es que el perro poco a poco, se vaya dando cuenta de la existencia del bebé, y esto puede ser haciendo pasar al perro a la habitación del pequeño, todos los días unos cuantos minutos mientras se adapta. A medida que el pequeño crezca, se puede ir aumentando el contacto con el perro, porque el animal ya estará acostumbrado a su presencia
