No todo momento es oportuno para la estimulación. No querrás que el bebé se excite, se canse o se aburra, por ello se debe encontrar un balance entre la estimulación y el estado de homeostasis, término fisiológico que describe a un organismo en constante equilibrio. Esto ocurre cuando estamos descansados, sin gastar más energía de la necesaria y mantenemos en estabilidad nuestros sentidos.
El bebé a su vez disfruta del estado de homeostasis, y mientras vayas jugando con él e interactuando con sus cambios de ánimo, será más sensible respecto a sus diversos estados. Mediante el ensayo y error irás descubriendo cuándo el bebé está anuente a ser estimulado y cuándo ha sido demasiado. Así, son las propias respuestas del pequeño lo que te permitirá saber qué cosas que generan su motivación y cuáles su adormecimiento.
Hay maneras de captar el interés del niño, ya sea mediante música clásica o a través de mecerlo, debes encontrar qué medida específica de estimulación puedes usar de acuerdo al estado anímico o humor de éste.
También existen técnicas de estimulación para dormir a los bebés. Se trata de movimientos repetidos y monótonos a la hora de arrullarlos. Intenta pasearlo, acariciarlo, darle suaves palmaditas o mecerlo en alguna silla o cuna con resortes especiales para eso. Otra forma de hacer dormir a un bebé es pasearlo en auto, ya que algunos requieren del movimiento para relajarse.
El estado de ánimo
Sabemos que los recién nacidos tienen su sensibilidad emocional a flor de piel. Y probablemente habrás notado que asimilan y captan perfectamente los estados de ánimo y sentimientos de sus papás. Debido a esto, son capaces de sentir las ganas o deseos que tengamos de jugar con ellos, y se dan cuenta también si no queremos hacerlo.
Debes tener cuidado de no desorientarlo con un doble mensaje. Él merece toda tu atención. Así que si estás sin ánimo o cansada (lo que es normal), busca otro momento en que estés más dispuesta a hacerlo.
Es más perjudicial jugar con él como obligada que esperar un rato para hacerlo. El bebé requiere de actitudes positivas que lo reconforten, lo que elevará su amor propio y seguridad.