Cuando somos padres queremos que nuestros hijos sean buenos en todo, por eso, trabajamos fuertemente para darles la mejor educación y de igual forma incluir en su aprendizaje normas y deberes que deben incluir y cumplir como parte de su rutina diaria.
Sin embargo, algunos especialistas han indicado que saturar a los niños con tareas escolares y extracurriculares les provoca alto indice de estrés y bajo rendimiento, esto por la cantidad de normas que deben cumplir día a día.
El ritmo de vida tiene mucho que ver con este tema, en la mayoría de los hogares, ambas figuras paternas deben trabajar y los chicos al verse abarrotados de actividades y sin ayuda comienzan a tener sentimientos de frustración y estrés. Este es el punto clave para entender que debemos brindarle a los niños gran parte de nuestro tiempo, y no saturarlos.
Todo en exceso es malo
Aunque queremos que nuestros hijos sobresalgan en la escuela, actividades deportivas, danza o cualquier habilidad y destreza que desarrollen, el exceso de rutinas diarias, pueden afectar al niño de forma negativa.
“Saturar a un niño con (actividades) extracurriculares es riesgoso, porque pierde la oportunidad de ser espontáneo y creativo en el juego”, señala la psicóloga de niños y adolescentes, Mónica Berrocal.
Las actividades extracurriculares causan estrés en los niños
Actualmente la cantidad de niños a nivel mundial con actividades extracurriculares es muy elevada, sin embargo, lo que realmente ha encendido las alarmas de los psicólogos y psicopedagogos es la cantidad de horas que los chicos deben dedicarle a las actividades escolares y extracurriculares, lo que, en vez de beneficiarlos, puede causarles un mal mayor.
“Muchos piensan que una rígida rutina desde pequeños es lo ideal, o que si esperan a que crezcan habrá menos posibilidad para el éxito dentro de una disciplina y no es así. Nada mejor que, cuando el niño esté listo y se sienta en plena capacidad, manifieste su deseo y se dedique con todo amor y pasión a la tarea que eligió”, psicopedagoga Laura Cáceres.
¿Qué tomar en cuenta?
- Como padres, lo ideal es esperar hasta que el niño manifiesta su deseo de practicar alguna actividad extra.
- Mantener una constante comunicación con los docentes del niño.
- Conoces y comprender las aptitudes y capacidades de nuestros hijos.
- Evitar saturar al niño con labores.
- Las actividades extracurriculares deben verse como una forma de distracción y desarrollo infantil.
- Especialistas han coincidido que el niño debe acudir a otras actividades sólo de así desearlo.
- No necesariamente debe realizar actividades extracurriculares diariamente, pero sí tener tardes recreativas.