Un soplo en el corazón de los bebés es un ruido leve que provoca la sangre al pasar por el corazón y aunque muchos padres se asustan cuando sus pequeños son diagnosticados con un soplo cardíaco, esto no quiere decir que implique una afección, inclusive, la mitad de los niños nacidos presentan esta condición que en la mayoría de los casos es inofensiva y no tiene mayor repercusión en la salud del niño.
Soplo en el corazón de los bebés ¿cómo detectarlo?
Generalmente, durante las primeras visitas al pediatra, el especialista mediante una exploración con el estetoscopio puede detectar si existe la presencia de un soplo en el corazón del bebé, luego de ello el pediatra junto al cardiólogo infantil determinarán si es un soplo funcional (significa que el niño está sano) o si proviene por un problema cardíaco en específico.
En los recién nacidos puede detectarse el soplo mediante una exploración realizada por el neonatólogo al momento de nacer; puede desaparecer en días u horas y la causa más frecuente es el ajuste de la circulación a las condiciones exteriores del bebé. También puede ser producto de una anomalía que desaparecerá por sí sola con el pasar de los días.
Por su parte, en los niños mayores se detectará mediante visitas rutinarias al pediatra o en cualquier análisis médico que requiera al niño antes de ingresar a la escuela o una disciplina deportiva. Aunque parezca señal de alarma, lo importante es conocer qué tipo de soplo tiene el niño, que en la mayoría de los casos es un fenómeno normal asociado a la expansión del volumen de la circulación de la sangre.
El ruido de la sangre cuando pasa por el corazón en periodos de crecimiento rápido es lo que genera turbulencias, mismas que son escuchadas con un estetoscopio, el pediatra se encargará de hacerle estudios a fondo al niño para descartar problemas cardíacos.
Soplos funcionales: también conocido como soplos inocentes o transitorios, suelen aparecer y desaparecer por sí solos durante la infancia y no provienen de trastornos cardíacos, este soplo es producto de un corazón saludable.
Soplos orgánicos en el corazón de niños y bebés: estos tienen lugar donde se presenta una anomalía cardíaca y son permanentes.
Síntomas de soplos orgánicos:
- El niño suda mucho.
- no crece adecuadamente.
- Respiración acelerada.
- Agotamiento.
- Se torna morado a la hora de realizar actividades que generen mayor esfuerzo.
Es mediante un radiografía de tórax que el pediatra diagnosticará qué tipo de soplo presenta el niño y añadirá la valoración del cardiólogo infantil para su posible tratamiento.