La otitis o dolor de oído del bebé se debe a distintas infecciones que se pueden atacar varias partes de éste (externo, medio o interno) y requiere un tratamiento con antibióticos.
Diagnóstico
Para empezar, los papás deben llevar al pequeño al pediatra para que éste determine si se trata de una infección. El médico utilizará un instrumento especial llamado otoscopio. Revisará a tu pequeño y determinará si las molestias que presenta el pequeño tienen que ver con dolor de oídos o con alguna otra dolencia que no hayas descubierto.
Debes saber que la otitis es muy común en los niños; según los expertos 7 de cada 10 niños sufre una infección en el oído medio antes de su primer año.
Es importante que los padres estén informados de los síntomas para que el bebé pueda seguir un tratamiento oportuno. Sumado a que tu bebé, siendo tan pequeñito no podrá verbalizar un dolor de oídos ni menos sus síntomas.
De ahí que es tan relevante que sepas reconocer síntomas y acudas a un especialista
Síntomas
- Fiebre
- Vómitos
- Diarrea
- Dolor de cabeza
- Molestias generalizadas
Tratamiento
Principalmente, se cura con antibióticos y calmantes. También se procura bajar la fiebre. El tratamiento a seguir mucho dependerá del grado de infección que presente el bebé. Ahora bien, recuerda que todos lo medicamentos y por supuesto el diagnóstico siempre será dado por el pediatra. Tu no puedes automedicar a tu bebé aunque sientas que sabes lo que tiene. Muchas veces no es así y podrías poner gravemente en riesgo su salud si optas por solucionar el problema por tus propios medios.
¿Qué es la mastoiditis?
Se trata de una infección provocada, por lo general, por la otitis del oído medio. Ésta afecta el hueso mastoideo del cráneo, ubicado justo detrás del oído.
Cuando el niño tiene mastoiditis, el tratamiento es más prolongado.
Esta afección es más común en los niños. Antes de que existieran los antibióticos, la mastoiditis era una de las causas principales de muerte infantil. La afección no es muy frecuente en la actualidad. Además es mucho menos peligrosa.
Síntomas
- Secreción del oído
- Dolor o molestia en el oído
- Fiebre que puede ser alta o incrementarse súbitamente
- Dolor de cabeza
- Pérdida de la audición
- Enrojecimiento del oído o por detrás de éste
- Hinchazón detrás del oído que puede hacer que éste sobresalga
Te reiteramos que siempre debes consultar a un especialista ante sospecha de dolor de oídos y prestar mucha atención a los síntomas que puede acompañar estas molestias en tu pequeño para evitar que pase a algo más complejo.