La mayoría de las futuras mamás experimenta un deseo irresistible de comer algún alimento en específico, ya sea algo que antes le encantaba o algo totalmente nuevo. También puede sentir antojos de oler algún alimento.
¿Pueden estos antojos afectar al bebé o determinar sus gustos o alergias a ciertos productos?
Durante el primer trimestre, muchas mamás sienten la necesidad de comer chocolates, frutas, helados, etc. También experimentan asco o rechazo por algunos olores o comidas que antes preferían.
¿Qué los ocasionan?
La razón tras estos antojos puede encontrarse en los cambios hormonales propios del embarazo. También se producen cambios en el gusto y en el olfato que pueden determinar estos gustos particulares. Y otra posible causa es que la madre genera un mecanismo protector ante elementos perjudiciales para el bebé, como los pescados, el alcohol o cualquier alimento tóxico.
¿Daños al bebé?
Respecto al supuesto daño para el bebé, la verdad es que los antojos no afectan a la salud del feto, siempre que se coman con moderación y que no se trate de alimentos prohibidos para las embarazadas.
Para asegurarse de tener antojos saludables, la madre puede redireccionar sus deseos, es decir, acostumbrarse desde un principio a comer alimentos sanos, con poca azúcar o grasas. Además, debe practicar ejercicio en lo posible y buscar apoyo emocional en su círculo cercano, para no satisfacer esa necesidad de afecto con comida.
Lo que sí hace daño
Existe una condición extrema en los antojos de algunas embarazadas llamada “pica”, se trata de una necesidad compulsiva de ingerir sustancias como tierra, jabón, arroz crudo, hielo, tiza, pasta dental, etc.
Las causas de estos antojos “raros” aun no ha sido identificada, sin embargo la Journal of American Dietetic Association esto puede estar ocasionado por la deficiencia del hierro.
Obviamente, si estás teniendo este tipo de antojos, es necesario que acudas al médico ya que satisfacer estos deseos es potencialmente dañino para ti y para tu bebé.