La necesidad de acudir a menudo al baño aparece tempranamente y se mantiene constante su aumento durante los 9 meses. El útero expandido se aprieta contra la vejiga, creando la sensación urgente de micción, por eso a muchas mujeres se les hace casi imposible controlar la orina en el embarazo.
Experto: Víctor Rubio, jefe de Ginecología y Obstetricia de Clínica Indisa
Una de las situaciones más comunes en el embarazo es tener ganas de orinar constantemente durante el día. Si antes podías aguantar varias horas sin pararte de tu asiento e ir al baño, ahora esa gran habilidad quedará en el olvido.
El Dr. Víctor Rubio, Jefe de Ginecología y Obstetricia de Clínica Indisa, explica que es “un síntoma frecuente en las embarazadas y se debe principalmente a problemas mecánicos, como la compresión del útero grávido sobre la vejiga, lo que hace que ésta disminuya su capacidad real y debe vaciarse más a menudo”.
Asimismo, los riñones también aportan efectos, ya que al aumentar la circulación sanguínea en el cuerpo de la embarazada, estos órganos deberán procesar mucho más líquido que en condiciones normales.
Dicha situación irá en aumento a medida que avance el embarazo. No obstante, hay mujeres que advierten que durante el segundo trimestre las idas al baño se normalizan.
¿Existe forma de controlar la orina en el embarazo?
Si bien no hay herramientas médicas que permitan disminuir la frecuencia o volumen de la micción, se deben tener presentes las siguientes recomendaciones para llevar de mejor manera esta etapa:
- Trata de NO evitar el consumo de líquidos durante el día con la esperanza de evitar la frecuencia de micción
- No dilatar más de la cuenta la ida al baño. Se debe ir cuantas veces sea necesario y en el momento que aparezca el impulso de micción.
- En nos controles prenatales, siempre compartir este síntoma con el médico tratante, esto permitirá evaluar la existencia o no de algún cuadro infeccioso urinario.
- Al orinar, inclina el cuerpo para adelante de esta forma podrás vaciar la vejiga completamente.
- Para disminuir la frecuencia en la noche, ingerir menos líquidos en la tarde o en la cena, pero siempre es recomendable ingerir una buena cantidad de agua diariamente para mantener hidratado el cuerpo.
- Como datos prácticos si vas al cine o algún evento público considera sentarte cerca de la salida, así podrás llegar en menos tiempo al baño.
- Tener precaución con los cambios de temperatura, ya que además de existir relación entre el reflejo de la micción y el frío ambiental, puede convertirse en un factor favorecedor de cuadros infecciosos urinarios.
- Realiza los ejercicios Kegels (que ayudarán con el control de vejiga y trabajo de parto).
Situación de alarma
Es común, pero no normal que la mujer durante el embarazo genere infecciones urinarias, producidas por bacterias, las que de no tratarse a tiempo podrían desencadenar una infección renal o parto prematuro.
Para detectarlas pon atención en los siguientes síntomas:
- Dolor o ardor al orinar
- Necesidad de orinar con mucha frecuencia, pero sólo salen unas pocas gotas cada vez.
- Sensación de seguir orinando aún cuando se ha vaciado la vejiga
- Presencia de fiebre y malestar general