La natación durante el embarazo es uno de los mejores deportes para las mamás, pero de a poco verás cómo el traje de baño no te queda
Experto: Maria Sanchez, matrona especialista en natación para embarazadas.
Los beneficios de la natación durante el embarazo son significativos. Mejoras en la irrigación y oxigenación sanguínea, disminución de la retención de líquido, mejoras en la capacidad respiratoria y una buena condición física, son sólo algunos de ellos.
Para desempeñar con plena seguridad este ejercicio físico es esencial tener a mano los elementos adecuados. Entre ellos el más importante, sin duda, será el Traje de Baño o Bañador, el cual según explican los expertos, posee como única característica esencial que la embarazada se sienta cómoda.
Es posible que tu traje de siempre ya no te resulte tan grato como antes, esto debido al aumento de volumen de tu vientre y busto. Será hora de tener uno nuevo. En el mercado existen diferentes modelos, aquí algunos datos para que tengas presente al momento de elegir:
- Privilegia aquellos que tienen copas moldeadas para los pechos, debes tener cuidado con que el elástico o “barba” no te apriete demasiado.
- Fíjate en que los tirantes sean cómodos y no se te claven en los hombros. Se recomienda pabilos más gruesos. También puedes encontrar con tirantes cruzados en la espalda, estos te permitirán sujetar mejor la prenda a tu cuerpo.
- Al probártelo, levanta los brazos, siéntate y da vueltas para que compruebes que te acomoda.
- Se recomienda aquellos hechos de licra con algodón y de colores vivos y alegres con los que puedas brillar en la piscina.
Considera también tener a mano una gorra de goma para cuidar tu cabello; pinzas para la nariz, que protegerán tus fosas y aletas nasales del contacto con el agua; lentes especiales, para que tus ojos no se irriten con el cloro de la piscina; y chalas o hawaianas, para salir de la piscina sin correr el riesgo de resbalones.
Se precavida y mete en tu bolso un secador de pelo de mano, recuerda que estás embarazada y debes cuidar mucho tu salud y en especial no exponerte a cambios de temperatura que te puedan enfermar.
Bañador para el verano
En la actualidad, estar embarazada ya no es motivo para que te quedes encerrada en casa durante el verano. Asimismo, ya no necesitarás ir con esa polera talla XXL sobre tu cuerpo, pues existen varios de modelos de trajes de baño que se amoldan a tu cuerpo, y otros con los cuales podrás lucir tu panza.
Te enseñamos algunas alternativas que puedes encontrar en el comercio:
- Bikinis: traje de dos piezas, cómodo y fácil de cambiar. Al igual que los trajes completos se aconseja elegir con tirantes más gruesos.
- Tankinis: calzón tipo bikini o hotpants, y una camiseta, ambos de la misma tela. La gracia consiste que la parte superior te cubre tu barriga, pero sin apretarte demasiado, pudiendo estar aún más fresca.
- Traje completo: como beneficio se puede rescatar que estilizan bastante el cuerpo y aún más el de una embarazada. Si no quieres gastar en uno especial, te aconsejamos comprar uno de talla más grande de la que sueles usar.