Algunas mamás se preguntan qué es mejor: tener hijos con poca diferencia de edad para que jueguen juntos, o esperar un tiempo para volver a cambiar pañales. Con esta nota pretendemos ayudarte a dilucidar este problema.
Los pros de las diferencias de edad
Una de las ventajas de tener a los niños separados entre sí es una mejor recuperación física, ya que para que el cuerpo femenino vuelva a la normalidad, necesita como mínimo 5 años.
Otro beneficio es que te permite disfrutar y darle atención exclusiva a cada niño, sin crear rivalidades. Además, el hermano mayor podrá ser un excelente protector para el menor.
Y, por último, una razón adicional es que podrás extender los años de crianza, es decir, tendrás a tus hijos en casa por más tiempo y no experimentarás el famoso “nido vacío” tan repentinamente. Si uno va a la universidad, el otro estará recién comenzando la enseñanza media, por ejemplo.
Los contras de las diferencias de edad
En cuanto a las desventajas, también hay factores físicos, como por ejemplo, que sobrepases la edad adecuada para tener un hijo llena de energía; sintiéndote cansada de empezar de cero otra vez.
Por otro lado, al existir una gran diferencia de edad, puede crearse una brecha muy grande entre los niños, por lo que tendrán menos cosas que compartir; dificultando también el satisfacer las necesidades de ambos a la vez.
Un inconveniente asociado a tu edad, es que tu embarazo podría ser más riesgoso que el primero, sobre todo, después de los 40 años.
En conclusión, tener hijos distanciados entre sí debido a su edad dependerá de tus preferencias personales, tu condición física y emocional, e incluso de tu presupuesto. En cualquier caso, piensa bien tu decisión y disfruta de tus hijos.
