Es muy normal que al cambiar las estaciones también se produzca una modificación en nuestro organismo, pero si aunado a esto nos encontramos embarazadas, la forma en que estas variaciones afecten nuestro organismo puede ser mucho mayor. Por ello, Facemama trae pata ti este artículo en el que puedes obtener conocimientos sobre qué es, cuáles son sus causas, cómo nos afecta y consejos para mantenerse saludable, sobre todo en esta etapa de tu vida.
¿Qué es la Astenia?
Lo primero que debes saber es que la astenia produce un efecto de debilidad y falta de energía generalizada, tanto física como intelectual, que reduce las capacidades de realizar cualquier tipo de trabajo incluyendo además las tareas más sencillas del hogar.
Causas que pueden provocarla
Existen diversas causas por las cuales se produce la astenia y que pueden ser un detonante, por ejemplo, las situaciones de estrés, ansiedad estimulada por las circunstancias difíciles de la rutina o la depresión, pero también puede tener su origen en una enfermedad orgánica como las alteraciones cardíacas, pulmonares, infecciones de todo tipo y entre otras. Cabe destacar que la de este origen es la más aguda y tiene los síntomas más determinados.
Así mismo, la astenia no sólo tiene que ver con las alteraciones en la temperatura, sino que, con el cambio de la presión atmosférica, el aumento de las horas cotidianas de luz y los cambios de horarios, que se convierten en mayor tiempo de actividad física y mental. Recuerda que durante el invierno se ven afectadas las reservas de vitamina D, serotonina y melatonina, entre otras, así como también existe el hecho de que los agentes alergénicos proliferan en este tiempo repercutiendo en el sistema inmunológico, lo que ayuda al desarrollo de este tipo de trastorno.
Astenia Primaveral
Suele manifestarse sobre todo las primeras semanas de la nueva estación y es por ello que más de la mitad de la población mundial se ve afectada durante este cambio, para esto debemos estar preparados y anticiparnos.
Entre los síntomas comunes encontramos que se siente más cansancio, irritabilidad, apatía, insomnio, falta de vitalidad y concentración. Esta es una de las indisposiciones más frecuentes de esta temporada, agobiando a más mujeres que hombres, en edades comprendidas entre los 20 y 50 años de edad.
¿Cómo puede afectarnos en el embarazo?
Recuerda que la astenia no es una enfermedad y no afectará a tu bebé, pero sí puede suceder que al iniciar la primavera, durante dos o tres semanas te cueste más llevar a cabo tus tareas diarias, por lo menos hasta que tu cuerpo se adapte al cambio de estación. También debes tener presente que en el primer y en el tercer trimestre de embarazo es habitual sufrir de mayor somnolencia y fatiga, producto de los cambios hormonales y del esfuerzo que tu cuerpo está realizando para sostener el crecimiento de tu bebé, por esta razón no debes preocuparte, debes ocuparte.
¿Cómo tratar la astenia?
- Cuidar la alimentación, es fundamental para lograr el equilibrio requerido por el organismo. Evitar las grasas saturadas, el café, bebidas alcohólicas y el exceso de azúcar, para ayudar a nuestro cuerpo a evitar el cansancio que genera este trastorno. Procura llevar una dieta equilibrada, incrementa el consumo de frutas, verduras y hortalizas, así como alimentos que ayuden a tu organismo a regular la producción de la serotonina, como aceite de oliva, las pipas (semillas de girasol), las nueces o el pescado azul.
- Aumenta las vitaminas del grupo B. Éstas son fundamentales para una amplia gama de funciones vitales, aunque su principal tarea está en asistir la liberación de energía de los carbohidratos, grasas y proteínas. Por tanto, ayudan a nuestro organismo a obtener energía. Recuerda no consumir estas de manera indiscriminada, ya que en la alimentación del embarazo tendrás todas las vitaminas que necesitas. Consulta a tu médico siempre que tengas dudas.
- No olvidar dos hábitos vitales para el cuerpo, más aún en el embarazo: la hidratación y un buen descanso. Una correcta hidratación siempre revitalizará el organismo, siendo importante ingerir de 2 a 3 litros de agua, junto con productos naturales, sin azúcares añadidos ni conservantes. Por otra parte, y debido a los cambios horarios, una buena rutina de sueño se hace fundamental en este tiempo.
- Hacer deporte, es el elemento que completa la ecuación para lidiar con la astenia. Debes hacerlo de forma suave y moderado, recuerda que estas en una etapa diferente y un poco delicada, estás embarazada.
Finalmente, ten en cuenta que la astenia es un fenómeno que no debería durar mucho tiempo, es sólo mientras el cuerpo se adapta al cambio de estación. Sin embargo, si sus síntomas persisten, visita a tu médico de confianza porque éstos podrían ser signos de alguna patología incorporada. No olvides que estas embarazada y es muy importante que siempre estés atenta y cuides tu organismo.