Anemia en el embarazo: síntomas, consecuencias y tratamiento

acidez en el embarazo

Durante el embarazo, es común experimentar cansancio, irritabilidad y debilidad. Sin embargo, es importante prestar atención a estos síntomas ya que podrían ser indicativos de anemia en el embarazo.

Guido Juárez de León, gineco-obstetra del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, explica que la anemia en el embarazo suele ser causada por la carencia de hierro. El desarrollo del feto requiere grandes cantidades de hierro, lo cual puede agotar las reservas de la madre.

Por esta razón, es habitual que a las embarazadas se les indique el consumo diario de hierro a partir de la semana 15 y hasta el parto. El hierro y el calcio son minerales de molécula grande que se absorben mejor si se toman alejados de las comidas.

Causas de la anemia en el embarazo

La anemia en el embarazo puede ser causada por varios factores, incluida la deficiencia de hierro. Esto puede ocurrir si una mujer embarazada no consume suficientes alimentos ricos en hierro o si tiene un flujo menstrual abundante antes del embarazo.

Síntomas de la anemia en el embarazo

La anemia en el embarazo se caracteriza por un descenso de hemoglobina o glóbulos rojos en la sangre debido a la falta de hierro. Algunos de los síntomas que se pueden presentar son:

  • Palidez en piel, labios, palma de las manos, uñas y parte inferior de los párpados.
  • Dificultad para respirar.
  • Mareos, fatiga y sensación de debilidad o cansancio extremo.
  • Problemas para concentrarse.
  • Taquicardia o latidos cardíacos demasiado rápidos.

Consecuencias de la anemia en el embarazo

Guiado Juárez de León señala que en general, la anemia en el embarazo no suele causar grandes complicaciones en el desarrollo del feto, principalmente porque se detecta a tiempo y se indica un tratamiento adecuado.

Sin embargo, cuando no se trata, puede provocar complicaciones como parto prematuro, bajo peso al nacer e incluso riesgo de mortalidad materna postparto en casos graves.

Por lo general, la anemia en el embarazo no causa grandes complicaciones en el correcto desarrollo del mismo, principalmente porque se detecta a tiempo y el médico indica un tratamiento.

Sin embargo, cuando no es tratada puede inclusive provocar parto prematuro, bajo peso al nacer, llegando inclusive a existir riesgo de mortalidad materna postparto cuando se trata de un caso grave.

El especialista agrega que “tendría que existir una anemia muy severa por una gran carencia materna para que repercuta en el feto. La anemia se clasifica según el porcentaje que ocupan los glóbulos rojos del volumen total de sangre, a esto se le llama hematocrito. También se usa la cuantificación de hemoglobina, que es una proteína contenida en el glóbulo rojo y es donde está el fierro. La hemoglobina es lo que le da el color rojo a la sangre. Lo normal es tener un valor de hematocrito sobre 36 y de hemoglobina sobre 12. Cuando el valor de hematocrito y hemoglobina materno esta bajo 24 y 8 respectivamente, se habla de anemia severa. Es rarísimo llegar a estas cifras. La anemia importante es un factor de mayor debilidad general, facilita las infecciones y agrava todas las enfermedades fetales y maternas”.

Riesgos para el feto

La anemia no tratada durante el embarazo puede representar riesgos para el feto. En casos graves o sin tratamiento, puede provocar complicaciones como parto prematuro, mayor pérdida de sangre durante el parto, bajo peso al nacer y retrasos en el desarrollo del bebé.

Diagnóstico y tratamiento

La anemia en el embarazo se puede detectar mediante pruebas de sangre comunes realizadas durante el control prenatal. Si se confirma el diagnóstico de anemia, el médico o matrona puede recomendar vitaminas prenatales con hierro o un suplemento de este mineral.

Es importante tener en cuenta que no todas las mujeres pueden tomar hierro de forma constante, ya que puede causar estreñimiento. Por lo tanto, la dosis se debe regular según las necesidades dietéticas de cada mujer.

Además de los suplementos, se pueden añadir alimentos ricos en hierro a la dieta. Las carnes rojas son una excelente fuente de hierro, pero para las vegetarianas también hay opciones como los frutos secos y las verduras de hojas verdes.

Cómo evitar la anemia en el embarazo

Para evitar la anemia durante el embarazo, se recomienda mantener una dieta equilibrada que incluya suficientes alimentos ricos en hierro.

También es importante seguir las indicaciones de los proveedores de atención médica sobre los suplementos prenatales. Los controles prenatales regulares son fundamentales para controlar los niveles de hierro y garantizar un embarazo saludable.

Recuerda que esta es información general y siempre es mejor consultar con un proveedor de atención médica para recibir consejos y orientación personalizados según tu situación específica.

Conclusiones

La anemia en el embarazo es común y se produce debido a la carencia de hierro. Se puede manifestar a través de síntomas como palidez, dificultad para respirar, fatiga y taquicardia. Si se detecta a tiempo, se puede tratar con suplementos de hierro y cambios en la dieta.

La anemia no tratada puede tener consecuencias negativas tanto para la madre como para el feto, por lo que es importante realizar un control prenatal regular y seguir las indicaciones médicas.


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