La ruptura con un ser amado siempre duele. Independientemente de los motivos, necesitarás tomar en cuenta estos 4 consejos para poder dar vuelta la página y comenzar tu nueva vida tomando en consideración el bien de tus niños.
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No te vengues
Muchas parejas olvidan toda su historia pasada y se envuelven en prácticas dañinas. Es una manera de vengarse por el mal cometido, ya sea mediante denuncias, acusaciones deshonestas o incluso actitudes violentas.
Si las cosas realmente están mal, lo mejor es acudir a un juez o mediador familiar que los trate de forma objetiva, dejando atrás los conflictos desagradables y enfados.
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No pongas en aprietos a tus amigos
No es justo para nadie tener que escoger bandos. Si tienen amigos en común, les será muy difícil elegir de quién serán amigos y de quién no. Tampoco es bueno que estés siempre hablando mal de tu pareja o revelando detalles íntimos frente a ellos.
Es de muy mal gusto contar qué manías tiene u otro tipo de infidencias. Piensa en esto: mientras más lejos tus amigos del divorcio, más fácil será seguir siendo amigos. Eso sí, siendo realistas, puede que alguno de tus cercanos no se sienta cómodo con tu nueva circunstancia o relación.
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No involucres a los niños
El divorcio es un hito especialmente difícil en sus vidas y es necesario para ellos el expresar sus emociones. Así que si los oyes llorar, enojarse o pedir explicaciones, no te desesperes. Explícales con claridad que nada de lo que ha pasado es culpa de ellos y reafírmales que siempre contarán con el amor de sus padres.
Sobre todo, no los obligues a tomar partido; el solo hecho de vivir separados ya hace que tengan sentimientos encontrados. No hables mal de tu ex con ellos, y si llegaras a hacerlo por no haberte controlado, pídeles disculpas. Recuerda que aunque ustedes como ex pareja tengan sus problemas, los niños no tienen por qué estar en medio de las peleas. Para su bienestar, procura ser conciliador y mantén el contacto para que no tengan que crecer sin una figura paterna o materna a su lado.
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Busca apoyo extra
Si debido a la separación te encuentras vulnerable psicológicamente o pasas por una depresión –o le pasa a tus hijos– no dudes en consultar con un especialista, ya sea psicólogo, psiquiatra o terapeuta de parejas. Está bien pedir ayuda para desahogarte y superar el divorcio.