Es fundamental tomar algunas medidas para evitar problemas como las estrías y las heridas en los pechos durante la gestación. Para ello, la especialista María Larée, Jefe de Neonatología del Hospital Clínico de la Universidad de Chile otorga importante información al respecto.
Desde el primer momento del embarazo hay que tener especial cuidado con los pechos, ya que se hinchan, aumentan de volumen y tienen mayor sensibilidad. Todo esto se debe a que comienza el proceso de la formación de la leche materna, por lo que se presentan algunas molestias.
Resequedad, heridas y estrías
- Para no tener resequedad en los senos en el embarazo, sobre todo en la zona de los pezones, es mejor evitar la aplicación de jabón durante la ducha, ya que elimina la hidratación natural de la piel. Esta sequedad puede provocar grietas y dolor al momento de amamantar, por lo tanto, se debe hidratar lo más posible.
- También para combatir las estrías es fundamental hidratar y fortalecer la piel. Para esto, se puede usar una crema hidratante por lo menos una vez al día, masajeando tanto el pecho como el pezón. No obstante, la crema que se utilice debe ser hipoalergénica, sin perfume, de textura liviana y de rápida absorción.
- Los pezones por su parte, poseen una protección natural proveniente del aceite o grasa generada por las glándulas de Montgomery, granitos ubicados en la areola que rodea al pezón. Por ello no es necesario, como antiguamente se creía, el uso sobre ellos de productos o elementos ásperos para fortalecerlo., No obstante, si sus pezones se encuentran secos, es recomendable utilizar una crema para la piel durante el embarazo.
- Asimismo, se aconseja la exposición al sol y al aire tanto de los pechos como de los pezones, para ayudar a su fortalecimiento. Esto se puede realizar de vez en cuando y por espacios de tiempo no muy prolongados.
Uso del sostén
- La elección del sostén también es parte importante del cuidado de los pechos, el adecuado te evitará problemas musculares.
- Los recomendados son de algodón, especiales para lactancia materna, que se pueden encontrar en diferentes tamaños, según la medida y el crecimiento del busto. Asimismo, incorporan ganchos para facilitar el amamantamiento.
- En cuanto a las telas, es mejor evitar las acrílicas, ya que favorecen la transpiración e irritación de la piel, por lo tanto, la aparición de hongos.
- En algunos casos, la talla del busto puede aumentar hasta en una medida, por lo que se hace necesario comprar un sostén de una talla más grande de la usual.
De esta forma, se evitarán molestias debido a que el sostén queda muy ajustado y ejerce mucha presión sobre los pechos sensibles. Durante la noche, lo más aconsejable es dormir sin sostén.
Método A L A S para el cuidado de los pechos
- Agua: Durante el baño se recomienda utilizarla sola, sin jabón ni otros elementos químicos.
- Leche: Consiste en la aplicación de unas gotas de este líquido sobre el pezón al terminar de alimentar al bebé. Esta técnica se realiza una vez que se esté amamantando, no durante el embarazo.
- Aire: Durante algunos minutos un par de veces a la semana.
- Sol: También durante algunos minutos en la semana.