Los niños sienten celos en diferentes etapas de la vida, por ejemplo con el nacimiento de un hermano o cuando la mamá muestra afecto a su padre.
“Los celos de tu bebé realmente no son tan malos, pueden representar algo positivo, porque a través de ellos identifican que eres su madre y quiere tu atención”, dice Juan Juanet, médico pediatra.
Pero cuando tu hijo sea mayor, es importante que le ayudes a entender que puedes darle tu atención y cuidado a otros pequeños, sobre todo si es a un nuevo miembro de la familia, una forma de hacerlo es involucrando a tu hijo desde la gestación y el nacimiento.
«Si haces que tu pequeño participe en las actividades cotidianas con su hermanito el compartir tu cariño no será un problema, ahora si no lo incluyes en las labores diarias se sentirá apartado o rechazado y automáticamente lo relacionará con la llegada del nuevo bebé», afirma Juanet.
¿Cuándo siente más celos mi bebé?
Por lo general los celos de un hijo se manifiestan de diferentes maneras y con más fuerza cuanto mayor sea el sentimiento hacia su madre, es decir, cuando experimentan la etapa de apego que es cuando el bebé descubre lo vital que es su madre en su alimentación, cuidado y amor.
“El bebé al llegar al mundo crea una especie de dependencia con su madre, porque necesita que ella cuide de él, y aunque la madre sienta que su bebé es muy pequeño para entender lo que pasa alrededor, la verdad es que está equivocada, ellos sí tienen el poder de saber a través de sus necesidades qué tan vitales son las personas que se encuentran en su entorno, y por general lo indispensable trae apego, y si un bebé siente un apego inmenso formará berrinches cada vez que se sienta desplazado”, explica el especialista.
Cuando un bebé detecta que alguna circunstancia reduce el tiempo, la ternura o la dedicación que la madre le ofrece, surgen los celos, entonces el hijo siente que tiene que competir por ganarse el cariño que hasta ese momento se le había otorgado solo a él. No existe competencia, el amor de una madre siempre será incondicional pero hay que saber trabajarlo y demostrarlo en diferentes momentos.
