El apego es algo que se da entre el bebé y su cuidador, que por lo general es la madre del pequeño puesto que pasa la mayor parte del tiempo bajo su cuidado.
La necesidad del bebé de estar próximo a la madre, de ser acunado, protegido y cuidado ha sido estudiada científicamente.En resumen el estado de seguridad, ansiedad o temor de un niño, está determinado por la capacidad de respuesta de su figura de afecto.
Tipos de apego
Apego Seguro:
- Se da cuando el cuidador o figura de apego demuestra cariño, protección, disponibilidad y atención a las señales del bebe, esto permite un desarrollo sano del niño y sentimiento de confianza.
Aquí estamos frente a un niño que explora sin temor, que se relaciona con el medio sin dificultades.
Apego Ansioso:
- Se da cuando el cuidador solo está disponible en ciertas ocasiones, esto hace que el bebe sea más propenso a la ansiedad por separación.
El niño al no sentir seguridad y protección constante de su figura de apego se angustia y llora al no tenerlos cerca.
Apego Desorganizado:
- El cuidador ante las señales del niño tiene reacciones desproporcionadas, al no poder calmar al niño, la conducta del adulto desorienta al pequeño generándole mucha ansiedad.
Las relaciones que dan lugar a cada tipo de apego
Niños con apego seguro: Se establece una relación entre la madre y el hijo que es recíproca, reforzante y capaz de regular la activación emocional del pequeño, y mantener una comunicación-acción sobre los objetivos. Esto crea en el niño expresiones de afecto positivo.
Niños con apego ansiosos-ambivalentes: Las mamás en estos casos son muy afectuosas y se interesan por sus hijos pero se les es complicado reaccionar a las señales del bebé, lo que las hace ser un poco incoherentes, es decir, a veces responden de manera positiva y otras veces se vuelven bastante sensibles. Esto trae como resultado que el niño no se cree expectativas de protección ya que no distingue en qué medida puede contar con su figura de apego.
Apego con niños evitativos: Aquí resalta la intolerancia o impaciencia por parte de la madre hacia el hijo, incluso en algunos casos, la figura de apego bloquea el acercamiento mamá-hijo provocando rechazo.