Los pediatras recomiendan que los padres les hablen frecuentemente a sus recién nacidos, incluso, aconsejan hacerlo desde la etapa prenatal, ya que esto les permite a los niños establecer un vínculo afectivo con sus padres, con la gente y el entorno que los rodea. Por medio de la comunicación se conocen las necesidades, el comportamiento y las sensaciones que experimenta el bebé.
Un recién nacido está acostumbrado a escuchar la voz de su madre y sus latidos cardíacos, así como también la voz del padre, esto sucede porque durante la etapa gestacional se han esforzado y dedicado a crear lazos fuertes de amor. Por eso es recomendable no sólo hablarle, sino también que disfrute de la música relajante (como el efecto Mozart).
Para estimular el desarrollo del habla del bebé es importante cantarle, bailarle, masajearlo, consentirlo y acariciarlo, pues el contacto piel a piel es fundamental para el desarrollo del recién nacido.
Los padres deben estimular el balbuceo del bebé e incitarlo a que repita lo que haces. Hablarle desarrolla sus habilidades de comunicación, gracias a que durante los primeros meses de vida se establecen conexiones neuronales, lo que resulta de vital importancia para entender el entorno.
¿Cómo hacer que el bebé disfrute de las primeras comunicaciones?
- Puedes lograrlo haciendo que el bebé disfrute de ejercicios motores, es decir, que inciten al juego, al movimiento.
- Es recomendable realizar juegos exagerando los movimientos y gestos de la cara, con el fin de ejercitar los músculos del habla.
- Platica con el bebé o cántale sin perder el contacto visual.
- Desarrollar actividades con música y cantos es una excelente manera de fortalecer la parte auditiva del niño.
- Es importante platicarle al bebé todo lo que ocurre alrededor, aunque no lo parezca, los niños pueden entender todo lo que le dices, en ocasiones lo expresan con balbuceos.
Cantarle al bebé: sus grandes beneficios
Cantarles a los bebés es una verdadera muestra de amor que las madres hacen casi de forma automática, y es que el efecto de cantar actúa como un tranquilizante para los niños, además es una distracción que les ayuda a aprender a respirar de manera relajada.
Sin duda alguna podemos llamar la atención de un pequeño con solo cantar o susurrar una melodía. Algunos especialistas aseguran que cantar les puede ayudar a mejorar el lenguaje y su inteligencia.
Está demostrado que a los bebés que se les ha cantado desde el vientre materno y durante sus primeros meses de vida aprenden a:
- Hablar más rápido.
- Tienen más vocabulario.
- Aprenden a concentrarse de manera fácil y divertida.
