El ronquido primario es aquel que se presenta en los bebés de forma natural, es decir no acarrea síntomas negativos, todo lo contrario a los ronquidos que obstruyen la respiración, que se han convertido en los causantes de los trastornos de apnea del sueño.
Especialistas como Pedro Astudillo nos aseguran que: “a pesar de que los ronquidos primeros se creen inofensivos, debemos estar pendientes, estudios han asociado este tipo de sonidos al dormir con alteraciones conductuales”.
¿Qué es la apnea del sueño?
Es un trastorno con elementos patológicos, que pueden producir detención momentánea en la respiración por aproximadamente 20 segundos, debido a que una vía respiratoria ha quedado estrecha, deteniendo la respiración y causando en el pequeño molestias que interrumpen su tranquilidad.
¿Por qué se presenta la apnea del sueño en mi bebé?
La obstrucción respiratoria puede ocurrir por diferentes factores:
- La presencia de adenoides y amígdalas grandes.
- La obesidad también contribuye a que se presente esta condición.
- Si tu hijo tiene la lengua muy larga, puede interferir bloqueando las vías respiratorias.
- Una mandíbula pequeña.
Otras causas de que tu bebé ronque pueden estar asociadas a rinitis infecciosa, alérgica o asma, de igual forma el estar expuesto a nocivos como el humo del cigarro, también influye y aumenta las molestias al momento de dormir.
¿Cuándo debemos estar alertas?
Si un bebé está atravesando un resfriado, esto puede cerrar las vías respiratorias, lo que quiere decir que es algo normal, pero a los pocos días el niño dejará de roncar y debe estar con su flujo de respiración normal.
Ahora bien, si después de pasar el resfrío, continua con esos ronquidos molestos, puedes aplicar los lavados nasales antes de dormir, si aún empleando este método persiste el malestar, lo más recomendable es consultar con tu doctor.
Síntomas de apnea del sueño en los bebés
- Dificultad para dormir.
- Una vez conciliado el sueño, es interrumpido a menudo.
- Somnolencia durante el día.
- Conducta irritante.
