En el primer año de vida suelen notarse muchos cambios en el desarrollo del bebé, su paso de gatear a caminar es uno de ellos, aunque tienden a manejarse parámetros sobre la edad en la que tiene que estar caminando, en muchos casos depende de la estimulación.
“La ambulación tiene un rango en que aparece, puede iniciar tan precoz como a los diez meses o puede comenzar hasta en su primer año y ser normal, pero posterior a un año y ocho meses se debe indagar por qué el bebé no ha comenzado a caminar”, explica el pediatra Juan Juanet.
Antes de los 12 meses los niños aprenden a gatear y aproximadamente a partir del primer año pueden dar sus primeros pasos, dando comienzo a una etapa de descubrimiento que le indica a la madre que debe estar alerta a todos sus movimientos.
La maduración muscular que se va desarrollando en los niños según su crecimiento y buena alimentación va a permitir que experimenten el correr, saltar, subir-bajar escaleras, hasta que en cierta edad aprendan a realizar actividades físicas complejas.
Ahora bien, todo tiene un límite y si tu bebé cumple el año y medio y no camina, incluso no intenta ni siquiera dar su primer paso, debes acudir al pediatra para que le haga una revisión exhaustiva y así descartar posibles debilidades en sus piernas u otros factores que le estén impidiendo avanzar en su desarrollo motor.
El niño antes de marchar suele pasar por cuatro etapas:
- Entre los 7 y los 8 meses por lo general se sientan y se van moviendo de nalguitas.
- A los 9 meses comienza la etapa de gateo.
- Con 10 meses comienza a perder el miedo y puede llegar a dar sus primeros pasos con la ayuda de sus padres.
- Alrededor del año el niño tiene fuerza suficiente en sus piernas y coordinación para ponerse de pie y hacer su primera marcha solo.
Los bebés deben experimentar todas estas etapas para que su desarrollo sea constante, cada fase es necesaria para la comprensión y el buen desenvolvimiento del bebé.