Si tu bebé está por cumplir 6 meses, quizás te preguntes con quién dejarlo cuando regreses al trabajo y cómo prepararlo para tu ausencia. Son cuestiones serias y no puedes dejar nada al azar. Como padres deben meditar en una solución permanente que permita al niño una sana adaptación, ya sea a un nuevo lugar o a un nuevo personaje en su vida. Dependiendo de las posibilidades económicas y las preferencias personales, hay varias alternativas: desde un jardín infantil a personas cercanas que lo cuiden en el propio hogar.
El jardín infantil
Un aspecto positivo de este lugar es que el pequeño estará en contacto con otros niños, en un ambiente seguro y vigilado por personal cualificado. Por otro lado, si bien hay una educadora, no siempre podrá dedicarle 100% de atención a tu hijo, ya que tendrá varios niños a su cargo. Si tu hijito tiene más de 1 año, es probable que se divierta mucho en el jardín de infancia. Pero si es muy chiquito, puede que le cueste más tolerar el ruido, los horarios o el contacto con otros.
La casa de una cuidadora (canguro)
Llevar a tu hijo a la casa de una cuidadora puede implicar que esté solo o con un grupo reducido de niños. Obviamente, antes de llevarlo tienes que inspeccionar el lugar, saber si la niñera tiene la experiencia apropiada y qué otros niños estarán junto al tuyo. Sólo puedes optar por esta alternativa si tienes absoluta confianza en la persona y en la seguridad de su hogar.
Una niñera en tu propia casa
Una niñera a domicilio es una de las opciones más comunes, ya que el niño está acostumbrado a su espacio y a sus rutinas. Pero al igual que con el método anterior, tienes que encontrar a alguien confiable y comunicativo para que responda cualquier duda que tengas respecto a tu hijo. Además, debe ser cariñosa y responsable.
Los abuelos
Aunque es una de las mejores alternativas –debido al amor que le tienen al bebé y a lo económico que es– pueden surgir ciertos desafíos. Por ejemplo, entenderse con la suegra o con la mamá en lo que respecta a la educación y los límites en la disciplina del niño no es nada fácil. Debe existir un buen diálogo para que no hayan malentendidos y siempre debe hablarse con mucha paciencia y tacto.
Se requiere adaptación
Claro, nada de esto es simple, ya que dejar a tu retoño en manos de otros tiene consecuencias en ambos. Pero para que la ansiedad por la separación sea más fácil de sobrellevar, debes preparar el ambiente, tratar de hacer entender al niño lo que está ocurriendo y familiarizarlo con todo lo que sea desconocido para él. Así, creará nuevos lazos y se sentirá cada vez más a gusto.
