Cargar al bebé, ya sea en brazos o con un canguro, es muy ventajoso. A continuación, te contaremos algunos beneficios asociados y que contribuirán a que tu bebé esté radiante de alegría y cómodo.
- En primer lugar, se ha comprobado que los bebés lloran mucho menos que aquellos que son cargados pocas veces al día.
- Ayuda a la flexibilidad del bebé, ya que favorece a la elasticidad de su cuerpo. Los expertos señalan que cuando el niño es cargado, se genera un proceso de doble sentido entre el bebé y quien lo carga.
- Es ideal para su desarrollo mental. Al estar cargados, el bebé dedica más tiempo en alerta tranquila, un estado que contribuye al aprendizaje. Todos sus sentidos se ven estimulados, siendo capaz de ver el mundo desde otra óptica –la de quien lo lleva en brazos–, y esa perspectiva permite que socialice mucho más.
- Crea una conexión con la mamá de modo espontáneo, por lo que es más fácil para ella el contacto visual por más tiempo, sin que le suponga una carga.
- Se desarrolla la cadera y columna del bebé de manera óptima.La posición rana es ideal, con las piernas bien abiertas y las rodillas por encima de la altura de sus nalguitas. Así, la columna logra estirarse.
- Fomenta la estabilidad emocional, así como la calma y la intimidad.El bebé está mucho tiempo con su cuerpecito pegado al tuyo, sintiendo tu olor y tus latidos. Este contacto físico es fundamental para los bebés, les permite crecer sanamente.
- Permite darle pecho a demanda y de forma discreta.
- Te da una mayor libertad de movimientos. Un porta bebés deja tus manos libres para hacer otras cosas o para desplazarte más fácilmente de un lado a otro.
- Al tener un tamaño pequeño, puedes llevarlo a distintos lugares o usarlo de otras maneras, como hamaca o abrigo.
- Son más económicos y accesibles que los coches.
