La niñez es el período en la vida de una persona desde el nacimiento hasta el desarrollo sexual, también conocido como pubertad. Pubertad del latín madurez sexual se refiere a la parte biológica de la adolescencia que está principalmente determinada genéticamente y tiene que ver con el crecimiento, los cambios en la forma del cuerpo y la madurez sexual.
No existe una periodización uniforme de la adolescencia. La adolescencia puede entenderse aproximadamente como el tiempo entre el inicio de la pubertad y la asunción de roles profesionales y sociales autónomos.
Sitúa un conflicto particular en el centro del desarrollo de cada etapa de la vida. Para la adolescencia, el desafío de desarrollar la identidad, a la que llamamos identidad versus difusión de la identidad.
La capacidad de entablar relaciones íntimas y de confianza y compromisos a largo plazo lo llamó intimidad versus aislamiento como una tarea en la edad adulta temprana. Hoy en día, los pasos de desarrollo se entienden individualizados y flexibles.
Desarrollando su propia identidad
Nombra tareas de desarrollo específicas que deben resolverse para cada fase de la vida. Para la adolescencia se pueden mencionar los siguientes:
- Aceptar su propio cuerpo
- Adquisición de roles de género en el conocimiento de la diversidad de roles de género
- Construyendo nuevas relaciones con enfoque de género y su diversidad
- Elección de carrera, formación profesional
- Adquisición de una acción socialmente responsable
- Desapego e independencia emocional de los padres y otros adultos
- Independencia económica de los padres
- Preparación para la pareja y la familia
- Desarrollo y apropiación del propio sistema de valores
Todas las tareas de desarrollo mencionadas y otras se engloban en el desarrollo de la propia identidad, es decir, entenderse como una persona única e inconfundible, iniciada por confrontación con el entorno social y consigo mismo son grandes desafíos
La adolescencia
El desarrollo no comienza en la adolescencia sino en la primera infancia, comenzando con las experiencias prenatales. Uno de los conceptos centrales actuales es el apego. Las experiencias de apego se consideran actualmente fundamentales para el desarrollo infantil.
Es típico de la adolescencia que las mujeres y los hombres jóvenes no tengan que asumir una responsabilidad social plena, pero al mismo tiempo puedan participar plenamente en muchas áreas de la sociedad.
Periodos de formación más largos significan que los jóvenes son económicamente dependientes durante más tiempo, mientras que al mismo tiempo son muy libres en las áreas de la moda, la música, el entretenimiento, los medios de comunicación, el tiempo libre y la formación de relaciones.
Además de las habilidades y destrezas técnicas y profesionales, la educación también promueve habilidades personales y sociales, lo que promueve la confianza en uno mismo y la seguridad conductual.
Numerosos jóvenes aprovechan las oportunidades de esta fase de la vida para su desarrollo personal, por ejemplo, viajar y posponen asumir roles o tareas de adultos, como comenzar una carrera o formar una familia.
