Ahora que el bebé tiene más de un año y medio, presenta mucha seguridad a la hora de realizar sus movimientos, caminar y hasta correr, cada día se propondrá más retos y es necesario estar muy vigilantes de su nueva aventura para evitar que ocurra algún accidente.
A esta edad la dieta del bebé puede ser similar a la del resto de la familia, tomando en cuenta que la leche sigue siendo un aporte esencial para el desarrollo del pequeño, recordemos que la Organización Mundial de la Salud, nos recomienda prolongar la lactancia hasta los dos años de vida
Ahora bien, con tanta energía, el bebé de 19 meses y 2 semanas se vuelve inagotable, tanto que si el niño no tiene deseos de ir a la cama, ni siquiera una buena rutina para ir a dormir nos ayudará. Entonces, ¿qué podemos hacer?
La hora de irse a la cama
- El hacer dormir al bebé es todo un desafío familiar y ahora que el niño tiene 19 meses es natural que se niegue, quizás porque podría estar convencido de que mientras él está solito en su cama, mamá y papá se están divirtiendo mucho.
- Es muy común que no quiera separarse de nuestro lado al término del día, ya que aún está con mucha energía y quieren seguir pasándola bien y la frustración aumenta si desde su habitación puede oír los sonidos de la televisión o las conversaciones de los adultos.
- Además, es posible que también le de miedo estar solo en la oscuridad.
- Reforcemos la idea de que la noche es para descansar y dormir, empezando a reducir el nivel de actividad a medida que se acerca la hora de ir a la cama.
- Evitemos prolongar la rutina: establezcamos límites.
- Algunas rutinas pueden ser muy útiles: un baño tibio, mimarlo al ponerle el pijama, leer cuentos o escuchar música suave, arroparlo junto a un peluche, etc.
- Disciplinar.
- Debemos ser cariñosas y comprensivas.
- Procuremos entender por qué piensa o actúa de determinada manera, sin justificar su conducta.
