Un problema recurrente en estos meses son las infecciones en los oídos. Mantente alerta a signos de irritabilidad o molestias en las orejitas. El desorden a esta edad también puede apoderarse de la casa, por eso te explicamos cómo solucionar estos dos inconvenientes de forma eficaz.
Otitis en el bebé
Entre los síntomas de la infección de oídos se encuentran los estornudos y las secreciones nasales. Un 70% de los casos de otitis comienzan con un resfriado que pasa a una infección debido a problemas con el sistema defensivo del pequeño.
A esta edad, los niños padecen otitis recurrentemente ya que su sistema inmunológico no es completamente maduro. Además, hay algunos factores que pueden incidir en las infecciones como por ejemplo el uso del chupete.
Si crees que tu hijo sufre una infección de oídos, consulta con tu médico, quien decidirá si se debe tratar con antibióticos. No todos los casos de otitis se tratan con medicamentos, algunos se curan por sí solos. Lo aconsejable es esperar de 48 a 72 horas antes de recetar antibióticos.
Lidiando con el desorden
A los niños de más de 1 año les encanta dejar sus juguetes tirados por doquier, sobre todo cuando algo les llama su atención y comienzan a acumular cosas en la alfombra.
Una manera de mantener el desorden a raya es limitar la zona en que los pequeños juegan con una baranda o cerco. También es útil tener un canasto para que los niños echen todos sus juguetes allí y los mantengan ordenados.
Obviamente, al ser un niñito todavía, no sabrá ordenar todas sus cosas, pero puedes enseñarle con el ejemplo. Convierte la labor de limpieza en una rutina entretenida para tu hijo, combinando las tareas de la casa con canciones y bailes.
Consejo para mamá
Si tu bebé no quiere comer, deja la comida en su platito y permite que él utilice su cuchara o tenedor. Haciendo que participe en las actividades logrará que el niño tenga una mucho mejor disposición a hacer las cosas.
